Julia Ramos
|
Estuve el Sábado y fué emocionante escuchar el repique de tanto tambor. Como muestra cultural y de que hay otras cosas que no son saetas, lamentos, duelos y demás manifestaciones lastimeras, tétricas, fúnebres y patéticas, a mí me valió la pena. Quien quiso verlo como acto religioso, bien; quienes quisimos verlo como manifestación cultural, también.
|