Martín de Valdeiglesias
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NARANJA para Manolo Ortega, y no es peloteo, porque gracias a su pericia para hacer periodismo de investigación, y por su valentía para difundir sus averiguaciones hemos pasado página en la amarga historia de Collado Villalba. Nos ha quedado un mal gusto al despertar de esa pesadilla faraónica, porque costará mucho esfuerzo devolver a los villalbinos el trabajo y la ilusión, pero con gente como Manolo será mucho más fácil
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