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Luis Miguel Encabo, en una imagen de archivo
Luis Miguel Encabo, en una imagen de archivo

Triunfo de Encabo en la feria de Valdemorillo

Por ALFREDO FERNÁNDEZ
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
El pasado fin de semana se celebraron los dos primeros festejos de la feria de Valdemorillo con una corrida de toros y una novillada picada. Es pronto para sacar conclusiones del abono pero de momento los resultados son bien justitos. Tan sólo hay que contabilizar la gran tarde protagonizada por Luis Miguel Encabo, que volvió a dar una dimensión de torero importante, y el valor y la decisión del novillero Pérez Mota. Del resto, poco destacable.

De momento el lamentable juego del ganado ha vuelto a ser una de las notas predominantes. Algo ya habitual en esta feria. La
de Tornay lució una presencia digna pero no sirvió, estaba hueca. Debió de ser baratita. Pero aún fue peor la novillada de “El Retamar”.

De presencia, era una escalera. Ganadería sin definir. Para dar categoría a una feria primero hay que apostar por hierros de crédito.

El sábado 4 se celebró la primera corrida de toros de la feria de Valdemorillo. El festejo trascurría anodino y aburrido. El público se estaba cansando ya de tanto borrego inválido. Pero salió el quinto. En ese momento la corrida ya pesaba como una losa. Pero un toro sin fuerza pero a más y un torero en sazón, Luis Miguel Encabo, salvaron la tarde y la corrida a la empresa. Encabo ya había cuajado de forma magnífica a su primero a la verónica, aunque luego se estrelló con un toro pegando tornillazos y defendiéndose. Pero, como decimos, con el quinto se vio la dimensión de este torero, que cada año sube un peldaño más en su carrera. El de “Tornay”, sin fuerzas, se afianzó también porque el madrileño, de forma inteligente, le dio sitios y pausas, y de esta forma brotó un toreo ligado sentido y de manos muy bajas. Varias tandas le bastaron para hacer crujir al público.

Una tanda por el pitón derecho de bello trazo y una efectiva estocada le pusieron las dos orejas en bandeja.

El resto del festejo transcurrió en terrenos de vulgaridad, y más si a toreros del corte de Liria y Uceda les ponemos ante animales de este tipo. Una generosa oreja se llevó Pepín Liria del cuarto, por una faena sin profundidad alguna y con muchos pases a destajo. Otra fue para Uceda Leal del que cerró plaza tras una faena con altibajos y sin tomar impulso, aunque con pases sueltos.

El domingo se lidió una novillada picada con el hierrro de “El Retamar”. Como era de esperar, y viendo como sale esta divisa, no funcionó. Su pobre juego se puede discutir, pero lo que no tiene disculpa es que el ganadero y el empresario lleven una escalera. Uno chico. Otro enano. Otro flacón, pero con dos pitones. Y sin estar “puesta”, es decir sin el cuajó y el remate mínimo para lidiarse. Hay novilladas y “novilladas”, claro que no todas tienen el mismo precio.

La tarde fue de Pérez Mota. Ya había mostrado sus credenciales con el primero, un animal soso y bobo con el que consiguió una labor templada y con buenos pases de pecho. Pero con su segundo, un novillo amoruchado y con sentido se pegó un arrimón y dejó patente muchos redaños y ganas de ser. Se demoró con los aceros. Una pena. El resto del festejo no tuvo interés. “Chechu” está aún tierno y aunque sus faenas tuvieron momento de buen aire no consiguió caldear el ambiente. Su lote fue una birria. Ana Infante es querer y no poder. La cuesta un mundo quedarse quieta. La regalaron una oreja.


1ª de Feria de Valdemorillo
Corrida de Toros


Sábado 4 de Febrero ‘06
Con media plaza cubierta, se lidiaron toros de “Tornay”, correctos de presencia, sin excesivo remate y con el peso justo dentro de la desigualdad. Encierro descastado, blando y apagado a excepción del 5º, sin fuerza pero noble y enclasado.

Pepín Liria, silencio y oreja; Luis Miguel Encabo, saludos y dos orejas y Uceda Leal, silencio y oreja.

Incidencias: Poco reseñable entre las cuadrillas.



Esta tarde se retoma la feria de San Blas con una novillada sin caballos

Esta misma tarde dará comienzo la segunda parte de la feria de San Blas de Valdemorillo. Y lo hará con una novillada sin picadores en la que se pone en liza el III Trofeo “La Chimenea de Oro” al novillero triunfador. En el festejo, previsto para las cuatro y cuarto de la tarde, se lidiarán seis erales de “La Torre de Cubillos” (propiedad de Alfredo Quintas), para Ginés López, Moreno Muñoz, José Manuel Más, Juan Carlos Rey, Alejandro Enríquez y Jesús Sánchez. Mañana, sábado 11, se celebrará la segunda y última corrida de toros del abono con Miguel Abellán, Fernando Robleño y el local Julio Pedro Saavedra, que se enfrentarán a astados de “El Serrano”. El festejo será retransmitido por la Televisión de Castilla la Mancha. La feria se cierra el domingo 12, con un festejo de rejones en la que intervendrán Martín González Porras, Martín Burgos y Álvaro Montes ante toros de “Campo Amor”.

Novillada con Picadores

Domingo, 5 de febrero ´06
Alrededor de un cuarto de aforo. Novillos de “El Retamar”, muy desigualmente presentados, la mayoría sin rematar y algunos, como los tres primeros, abecerrados. 5º y 6º con más cara. De pobre comportamiento.1º, 2º y 3º nobles, aborregados y sosos. 4º, difícil; 5º, potable y 6º inválido. Pérez Mota, oreja y silencio; Ana Infante, saludos y oreja y José Ramón García “Chechu”, silencio en ambos.

Incidencias: Buena brega de Javier Andana.
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