El CUC Villalba recibe al Rayo Majadahonda tras la destitución de Cerdán

Nueva depresión en el Villalba. La derrota del pasado jueves en Pozuelo, gol de Aguilera a tres minutos del final en la única llegada local, se cobró al día siguiente la destitución de Miguel Cerdán. “Es una decisión unilateral y no puedo hacer nada. Creo que es equivocada, aunque por supuesto la acato. Yo me sentía con fuerzas y estaba muy contento en el equipo, porque a los chicos les veía convencidos de que con trabajo esto se iba a sacar adelante”. Es la valoración del ya ex técnico del CUC Villalba, que se va con un balance de seis derrotas, dos victorias y dos empates. Muchos varapalos para un equipo obligado a remontar, tras recibir la herencia de Milicic. Cerdán ya era susceptible de ser cesado ante el Villaviciosa, pero el equipo ganó tras una convincente actuación en ataque y se aplazó cualquier decisión, en la confianza de que ese 3-2 fuera una rampa de despegue. Por eso, la discreta actuación del equipo en el choque clave de Pozuelo fue definitiva. El Villalba pareció superior pero le faltó fe en sus posibilidades. No jugó bien, pero tenía anulado al Pozuelo. Por eso, cuando con 0-0 Cerdán sustituyó a Sequeiros - “él me pidió el cambio, se llevó un golpe en la cabeza y estaba mareado”, según el técnico -, afición y directiva no entendieron la decisión de quitar al hombre que fijaba casi todas las precauciones del Pozuelo. Felipe Huelva reaccionó metiendo al punta Alfonso para jugar la recta final y los locales se sacudieron el dominio amarillo para golpear a cuatro minutos del final por mediación de Aguilera. Cuando la derrota se consumó, las caras en el palco eran las que anteceden a las decisiones drásticas. “Ha sido un palo”, dijo el director deportivo al día siguiente, cuando confirmó oficialmente la destitución de Cerdán. “No creemos que sacar 8 puntos de 30 sea un buen balance”, añadió. José Torres ofreció un argumento similar al que justificó la salida de Nebo Milicic.

Vuelve Bertó y llega Casado
De momento, no hay sustituto para Cerdán, aunque existen conversaciones con un entrenador que trabajó el año pasado en el grupo manchego de Tercera División con excelentes resultados. En lo que llega, el club apostará por segunda vez este domingo, ante el Rayo Majadahonda, por la solución interina que representa Luis Bertó. El técnico conoce a la plantilla a la perfección y desde el club se sostiene que su sistema de juego se adapta a las necesidades actuales del equipo. Las otras novedades están en la plantilla: Juanín, descartado por Cerdán, ya ha sido repescado; y también se ha tramitado la ficha a Quique Casado, un jugador de la cantera que regresa tras haber jugado en Las Rozas, tanto en Tercera como en su juvenil de División de Honor. Se trata de un interior izquierdo reciclable como segundo punta. De cara al trascendental choque ante el Majadahonda, son baja Salvat, Ríos, Espino y Serna, por lesión, y se está pendiente de la evolución física de Sequeiros, que se llevó varios golpes en Pozuelo, y Castro, que en ese partido estuvo en el banquillo tras padecer una fuerte sobrecarga producto de su intensa actuación ante el Villaviciosa. Delante estará un Rayo Majadahonda que, curiosamente, también presenta cambio de entrenador: Eduardo Valcárcel, técnico del filial, dirigirá al equipo en lugar del destituido Eduardo Caturla. Son los ingredientes de otro duelo directo para intentar salir del pozo, en un día en el que el club vuelve a pedir apoyo a la afición.