El cerebro de bebés prematuros podría anticipar futuras enfermedades

Un equipo internacional de investigadores, que incluye a expertos de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), ha planteado una inquietante pregunta: ¿puede el estado cerebral de los bebés prematuros influir en su desarrollo futuro y ofrecer indicios sobre posibles enfermedades o trastornos? Este estudio se centra en identificar cómo los patrones de activación cerebral en estos infantes pueden afectar su crecimiento y salud a largo plazo.

Lucilio Cordero, investigador de la UPM, detalla que “la activación cerebral es inherentemente dinámica”. A lo largo del día, nuestro cerebro transita por diferentes estados dependiendo de diversas circunstancias emocionales y ambientales. Este fenómeno también se observa en los bebés, quienes alternan rápidamente entre sueño y vigilia, llanto y calma, especialmente en las semanas posteriores al nacimiento. Sin embargo, en los casos de nacimientos prematuros, esta actividad cerebral podría manifestarse de manera diferente.

Investigaciones sobre el cerebro infantil

Los científicos han observado que en adultos, diversos estudios han relacionado patrones dinámicos de conectividad cerebral con habilidades lingüísticas, cognitivas y motoras. Por ello, se propuso aplicar técnicas similares para analizar a recién nacidos. Para llevar a cabo esta investigación, utilizaron imágenes de resonancia magnética cerebral obtenidas con una resolución sin precedentes dentro del proyecto Developing Human Connectome Project (dHCP), respaldado por el Consejo Europeo de Investigación.

El enfoque del estudio se centra en las diferencias en los patrones de conectividad cerebral entre bebés prematuros y aquellos que nacen a término. Los escaneos se realizaron justo antes del momento que correspondería al nacimiento a término para los bebés prematuros y unos días después para los bebés a término. Esto permite evaluar cómo el tiempo pasado fuera del útero materno afecta el desarrollo cerebral durante el tercer trimestre gestacional.

Diferencias significativas en la conectividad cerebral

Los investigadores identificaron seis estados cerebrales distintos: tres abarcan todo el cerebro y tres están limitados a áreas específicas como las regiones occipitales, sensomotoras y frontales. Al comparar ambos grupos, se observó que los bebés prematuros pasaban más tiempo en ciertos estados cerebrales relacionados con estas áreas específicas. Además, la dinámica del estado cerebral al nacer mostró correlaciones con diversos resultados del desarrollo durante la primera infancia.

La relevancia del estudio radica no solo en las diferencias observadas entre ambos grupos, sino también en la identificación por primera vez de una asociación entre alteraciones en los patrones de activación cerebral al nacer y características conductuales medibles a año y medio. Esto abre nuevas posibilidades para entender mejor el neurodesarrollo infantil.

Implicaciones futuras para la salud mental

Cordero señala que este estudio pionero proporciona nuevos métodos para caracterizar disfunciones en el cerebro neonatal, lo que podría tener importantes implicaciones para un diagnóstico temprano de trastornos del neurodesarrollo. Los hallazgos podrían contribuir al diagnóstico precoz de condiciones como la esquizofrenia, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad o el autismo.

Además, un análisis detallado de las dinámicas cerebrales podría facilitar la creación de protocolos personalizados para prevenir e intervenir ante estos trastornos mentales. El estudio ha sido publicado recientemente en Nature Communications y ha contado con la colaboración de diversas instituciones académicas y hospitales internacionales.

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