El Sindicato Profesional de Agentes de Movilidad, S.P.A.M., federado en CSIT UNIÓN PROFESIONAL y mayoritario entre los efectivos del Cuerpo municipal, asegura que un 85% de la plantilla quiere abandonar el Cuerpo. El Sindicato Profesional de Agentes de Movilidad, S.P.A.M., federado en CSIT UNIÓN PROFESIONAL y mayoritario entre los efectivos del Cuerpo municipal, asegura que un 85% de la plantilla quiere abandonar el Cuerpo.
En apenas cuatro meses, 154 agentes (en torno a un 30% de la plantilla) pasarán a Policía municipal, sin que ningún candidato opte por hacerlo a la inversa, como bien queda demostrado.
Ante esta situación de fracaso, consideran que el Ayuntamiento prefiere hacer oídos sordos, sin tener una planificación ni reflexión al respecto.
Esta incertidumbre preocupa a los Agentes de Movilidad que sí permanecerán en la plantilla, pues si con las condiciones actuales la conciliación familiar es prácticamente inexistente, con una reducción tan drástica de plantilla y sin un plan adecuado, el futuro del Colectivo es, cuanto menos, dudoso.
Cabe destacar, que el Sindicato Profesional de Agentes de Movilidad avisó con anticipación del fracaso de dicha convocatoria, ya que no se iban a llevar a cabo unas pruebas físicas baremadas por edad, al igual que se realizan en el resto de las promociones internas en las administraciones.
"Una vez más, la prepotencia de la Corporación hizo que la solicitud sindical fuera desatendida, dando como resultado el bochornoso y vergonzante desenlace, respecto al ínfimo número de aspirantes presentados a esta convocatoria", señalan.
En el mejor de los casos, se cubrirán 3 de 130 plazas, y mínimo 127 plazas serán “tiradas a la basura”, lamentando que esto demuestra que el Colectivo de Agentes de Movilidad atraviesa su peor momento.
El Colectivo de Agentes de Movilidad se creaba hace 20 años, con el objetivo de ser un cuerpo nuevo en el Ayuntamiento de Madrid destinado a suplir a Policía Municipal en las funciones del tráfico en la ciudad de Madrid.
A fecha de hoy, lejos de ir aumentando la plantilla, ésta ha ido menguando. Lamentablemente, el fin del Cuerpo parece estar cercano, ante la negativa del Consistorio madrileño de hacer atractivas sus condiciones laborales y posibilitando que los trabajadores estén cómodos y se sientan seguros y respaldados.