En el caso de la M-614, se ha instalado en el punto kilométrico 8+200 –a la altura de la Urbanización Guadamolinos– un semáforo de control de velocidad para que los conductores circulen más despacio y, de esta manera, aumentar la seguridad peatonal en el entorno de estas viviendas.
En esta misma travesía se han construido pasos de mediana, una acera en la parada de autobús situada en la urbanización Vallefresnos, y se han realizado trabajos de asfaltado en 2,6 kilómetros, además de reforzar con una capa de asfalto de 5 cm hasta el acceso a la A-6.
Pérez ha destacado la necesidad de “llevar a cabo estas obras con el objetivo de mejorar la conducción en este tramo, ya que por esta carretera transitan más de 6.000 coches al día, con un porcentaje de vehículos pesados cercano al 10%”
El Gobierno regional ha invertido un total de 366.500 euros en estas infraestructuras viarias, presupuesto que se encuentra incluido en los Contratos de Mantenimiento de Firmes y de Instalaciones Semafóricas y Luminosas de la Red regional, cuya finalidad es conservar y mejorar la seguridad vial y la comodidad en la circulación.
Minimizar el desarrollo de las altas velocidades
Por otra parte, se ha actuado en la M-623, para minimizar la velocidad de los coches a su paso por el municipio. Las labores se han ejecutado en un tramo recto de travesía de unos 800 metros que pasa por la Urbanización La Llama y el Tanatorio municipal.
Asimismo, se ha adecuado la señalización vertical; estrechado los carriles a 3,25 metros; aumentado la longitud de los arcenes; implantado señales LED en el paso de peatones situado en las inmediaciones de la glorieta con M-614; y se ha prohibido adelantar en todo el tramo de actuación, desde el inicio del estrechamiento de carriles hasta la glorieta, dejando en discontinuo los accesos existentes, para lo que se ha repintado las marcas viales de la carretera.
También se ha reubicado la parada de autobús situada en la margen izquierda, cerca de la Urbanización la Llama, por lo que ahora cuenta con un nuevo itinerario peatonal, un paso de cebra y una disposición más coherente frente a la parada del otro sentido.
Radares didácticos y un semáfoto de preaviso
Por último, el consejero de Transportes e Infraestructuras ha destacado las actuaciones en la M-510, entre las urbanizaciones Media Luna y el colegio San Agustín Los Negrales. En ellas se han colocado dos radares didácticos (que advierten de la velocidad a la que se circula), para disuadir a los conductores de exceder los límites establecidos por las normas de tráfico, sobre todo en los alrededores de escuelas o en áreas frecuentadas por peatones.
Asimismo, se ha instalado un báculo semafórico de preaviso con un panel LED para reforzar la señalización del límite de velocidad y de zona controlada, y se han situado carteles con fondo fluorescente que advierten de la presencia de peatones.
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