Del total, 13,7 millones serán para la activación profesional y la actualización de las destrezas y conocimientos de los parados participantes, que firmarán un contrato de, al menos, 12 meses de duración. Durante ese periodo, llevarán a cabo obras y servicios en las localidades que pueden optar a las ayudas.
Las actuaciones de cualificación profesional contarán con 2,35 millones, que se utilizarán para que los demandantes de empleo puedan obtener un certificado de profesionalidad mediante la formación en alternancia con la actividad laboral, también durante un año.
De esta forma, se sufragarán los costes salariales y de cotización a la Seguridad Social del contrato, un plus de transporte cuando el alumno-trabajador tenga que desplazarse desde su localidad de residencia, así como los gastos derivados de la impartición de la formación. Podrán solicitar las ayudas (en régimen de concurrencia competitiva) las entidades locales recogidas en la Estrategia para revitalizar los municipios rurales de la región, ya sean municipios o mancomunidades.
En la convocatoria del año pasado se presentaron 97 solicitudes (86 para práctica laboral y 11 de cualificación profesional) y se concedieron 75 subvenciones a otras tantas entidades locales, que permitió formalizar 471 contrataciones.