El pasado sábado, con los actos de investidura, quedaron definitivamente cerradas las corporaciones municipales en la Sierra de Guadarrama, acto en el que quedó en evidencia la hegemonía aún del Partido Popular (PP) al frente de los consistorios serranos, en un momento en el que precisamente la formación que lidera Pablo Casado no pasa por su mejor momento. Aun así, cinco regidores del PP han sido refrendados para gobernar sus respectivos municipios hasta el año 2022 , ellos son los de Collado Villalba (Mariola Vargas), Guadarrama (Diosdado Soto), Valdemorillo (Santiago Villena), San Lorenzo de El Escorial (Carlota López), El Escorial (Antonio Vicente), y María Rubio Sadíe en Collado Mediano.
Por su parte, el PSOE ha obtenido las alcaldías de Galapagar (Alberto Gómez), Los Molinos (Juan P. González), Colmenarejo (Mirian Polo) y Navacerrada (Ana Paula Espinosa).
En el caso de Cercedilla, Luis Miguel Peña ha accedido a la presidencia local al frente de la coalición formada por PSOE y Podemos. Algo similar ha sucedido en Alpedrete, con el pacto entre PP y UMPA a los que, posteriormente y a través de un acuerdo programático, se unió Ciudadanos.
El Ayuntamiento de Robledo de Chavela, otro caso peculiar, estará regido de nuevo por Fernando Casado, ahora bajo las siglas de Ciudadanos (Cs) y después se hacerlo el mismo alcalde la pasada legislatura, pero luciendo las siglas del Partido Popular.
Dos ayuntamientos serranos serán presididos por alcaldes de “Vecinos por…”, caso de Torrelodones (Alfredo García Plata), que gobernará con mayoría absoluta y de Moralzarzal que estará nuevamente presidido por Juan Carlos Rodríguez Osuna, ésta vez en coalición con Ciudadanos.
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