Soy el padre de unas niñas escolarizadas en el Colegio Leonardo da Vinci de Moralzarzal. Hoy lunes 8 de enero, primer día de colegio después de las vacaciones de Navidad, hemos sufrido nuevamente las consecuencias del abandono al que nos tiene sometido el ayuntamiento. Debido a la nevada de ayer y la helada caída durante la noche, esta mañana cuando hemos llegado al colegio nos hemos encontrado con la acera de acceso al colegio convertida en una pista de hielo de unos 20 metros de longitud, en concreto, el tramo que une el aparcamiento de tierra (lleno de socavones, del que sólo se acuerda el alcalde para ir a tirar los fuegos artificiales de las fiestas) con la entrada principal del colegio ¿Es tan complicado ser el responsable de la gestión de una ciudad y no darse cuenta de que después de una nevada conviene esparcir sal por las calles y aceras y especialmente por los principales centros de trabajo o afluencia? ¿Y en Moralzarzal cuáles son estos? Pues fundamentalmente los tres o cuatro colegios que hay. Me parece de una irresponsabilidad tremenda la dejadez habitual con que se trata este tema teniendo en cuenta que hay cientos de niños que acceden a este colegio por ese lugar y me parece terrible la imagen de muchos padres con los niños en brazos para intentar evitar los resbalones de los más pequeños y ningún trabajador del ayuntamiento tratando de solucionar esta situación. Entiendo que el colegio sea privado, pero hasta donde yo sé la vía pública depende del ayuntamiento.
De la obra para solucionar lo de los adoquines de la avenida de la salud mejor no hablo. A estas alturas solo espero que dure menos que la obra de El Escorial (1562-1584) y mis hijas lo puedan ver algún día.