LOS VERANOS DE LA SIERRA (1983)
De Villalba a Guadarrama cuatro leguas, grandes fiestas y un montón de famosos
Collado Villalba es como París, poco más menos, por la gente que hay. Pasó del prado y las vacas al zoco, dónde hay comercios y entretenimientos, incluyo hasta eso de los helados italianos, que está teniendo un éxito fenomenal, escribía en el diario ABC la periodista Isabel Montejano, el 15 de agosto de 1983.
Son cien mil los veraneantes que llegan estos últimos años a Collado Villalba, importantes hay muchos, esa es la verdad, pero se esconden, no se sabe dónde están, quién sabe. Dicen que José Barrionuevo, Ministro del Interior, está aquí, pero la verdad es que nadie le ha visto y lo que estará deseando es descansar en el chalecito de Los Negrales; otro que aparece es Mariano Martín Torrejón, que más que veraneante es residente, prro volante, eso sí, volante; Francisco Sánchez Luis, el pintor extremeño de la Sierra de Gata; José Martín Simón, el hijo del poeta Villaespesa, Francisco Villaespesa que le da al pedal que es una maravilla con su hermana Lola, la genial actriz que piensa hacer algo en memoria de su padre; o Virgilio Oñate Gil, el ex ministro que en sus tiempos favoreció algunos proyectos de Collado Villalba o el político y dirigente socialista, José Acosta.
En Guadarrama la ‘crém de la crem’ del famoseo
Por otro lado, el enclave de Guadarrama, pueblo entre parajes tan hermosos como La Jarosa, Montepinar, el puerto de Los Leones de Castilla, el Mirador de Cabeza Lijar, el camino de Los Molinos y el Valle de Cuelgamuros, hacen de este municipio el lugar ideal para el descanso de los fines de semana y, sobre todo, para las vacaciones estivales. Por sus especiales condiciones, todas buenas, buenísimas, Guadarrama siempre fue ‘curandero’ de madrileños ‘enclenques y esmirriados’, y como otros pueblos serranos fue ‘recetado’ por los mejores médicos.
Entre hoteles, hostales y pensiones hay unas 250 plazas hoteleras. Pero extrahoteleras, ni se sabe. “Hemos crecido mucho en los últimos años y aquí no cabe ni uno más”. Sin embargo y a pesar de que quizá se diga eso un poco egoístamente, todavía hay futuro en Guadarrama. Prueba de ello es que por aquí han paso durante años, la ‘crém de la crém’ del famoseo’, todos ellos personajes importantes de la vida política, social y económica de Madrid. A saber: autor Alfonso Paso y su familia; el pintor Mariano Izquierdo y Vivas; Adolfo Torrado, Augusto Alguero padre; Santiago Moncada, Federico Rubio y Gali; el torero Rafael Albarraicín, el general Perón que pasó alguna temporada en la Colonia o Miguel Fleta, que aquí ‘acariciaba’ su garganta para cantar.
Pero hay otros no menos importantes que siguen viniendo, quizá porque Guadarrama sea un pueblo que ha conservado su carácter serrano y al mismo tiempo ha sabido entrar de lleno en el turismo veraniego. Desde el promotor don José Banús Masdeu, que tiene un gran finca; el afamado doctor Flores Tascón que cuando viene por aquí sus motivos tendrá; el escultor Venancio Blanco, el actor y humorista Zori, el doctor Zapatero, Carlos Pérez de Bricio, ex ministro de Industria que pasa en Guadarrama grandes temporadas o escritores como Marisa Villadefrancos, el general laureado Claudio Rivera Macías, Santiago Vázquez el de “un mundo para ellos” y, hasta Jorge Verstringe que ahora. Dicen, está en la urbanización La Jarosa de la Sierra, ¡Cómo! ¿pero Verstringe también por aquí?. “Es que este chico se mueve mucho”, como decía Don Tierno Galván.