Las razones que llevaron a la oposición de Galapagar a rechazar la modificación de las Normas Subsidiarias

La negativa de los grupos de la oposición de Galapagar a debatir en el pleno celebrado el pasado mes de septiembre, la propuesta realizada por el Ejecutivo del PP, presidido por Daniel Pérez, donde solicitaba apoyo para poder modificar las Normas Subsidiarias, en vigor desde hace más de treinta años.

El rechazo a dicha propuesta, según ha podido saber El Faro del Guadarrama, que posteriormente seria retirada del orden del día, estuvo basada en “la pobre documentación presentada por el Ayuntamiento, basada fundamentalmente en planos mal definidos y confusos, lo que hacía muy complicado poder entender que era lo que se pretendía aprobar. Además, añade en un informe Cambiemos Galapagar, la memoria que los acompañaba tampoco aclaraba que era lo que se pretendía modificar exactamente en cada sitio. Así era complicado conocer el alcance de la propuesta. Aún así, dice uno de los asistentes a dicha reunión, se pudieron observar algunos errores en los mapas, detectándose también la inclusión de varios artículos con los que se pretendía regular los Altos de La Navata y los terrenos de La Peraleda (donde se pretende construir un macrocentro comercial), que aparecían en dichos documentos como ‘urbanizables en trámite’, cuando deberían aparecer como no urbanizables”.
¿Amnistía urbanística?
También quedó probado que la modificación propuesta por el Gobierno del PP, además de no ser clara, suponía una amnistía urbanística, pues de llegar a aprobarse, según fuentes consultadas por este periódico, se legalizarían todas las ilegalidades cometidas en materia de urbanismo en este municipio durante los últimos 40 años. Ejemplo: autorizar de manera encubierta edificios de cinco alturas en zonas donde la normativa solo autoriza tres; aceras más estrechas y bloques más altos que provocarían que algunas calles del municipio no vieran nunca el sol, además de la usurpación de algunas vías pecuarias”.

El debate en este reunión, a la que por cierto no asistió el Equipo de Gobierno, fue muy interesante, enriquecedor y en ocasiones, hasta tenso, sobre todo cuando el Partido Socialista parecía dispuesto a votar a favor de la modificación de las actuales Normas Subsidiarias, pues si así fuere, podría dar la mayoría absoluta que precisaba el PP. Al final esto no sucedió y la normativa urbanística de Galapagar sigue sin modificarse, al menos por ahora”.