El joven guadarrameño Ibai Castro, ilusionado ante las finales del Campeonato de Madrid de Boxeo Olímpico

El polideportivo de Collado Mediano será escenario este sábado, a partir de las 16.30 horas, de las finales del campeonato de la Comunidad de Madrid de Boxeo Olímpico en las categorías de Élite Femenino, Jóvenes, Cadetes, Infantiles y Alevines. Entre los participantes destaca el joven de 16 años Ibai Castro, vecino de Guadarrama, que entrena en la Escuela de Boxeo Escriña (Collado Villalba) y estudia 4º de la ESO en el colegio Gredos San Diego.
¿Cómo afrontas esta cita del Campeonato de Madrid de Boxeo?
Con gran ilusión y ganas de poder competir y demostrar mi sacrificio en el entrenamiento y también adquirir experiencia en un deporte de contacto como es el boxeo.
¿Supone un aliciente extra, una motivación, boxear casi en “casa”, en la Sierra?
Por supuesto, tengo mucha alegría de que los promotores hayan hecho posible que estas finales del Campeonato de Madrid se celebren en Collado Mediano, donde está gente conocida y amigos, y que supone una gran motivación para competir.
¿Cómo están siendo estos días antes de la competición?
Ahora debo intensificar mis entrenamientos, prestar mucha atención a la alimentación y mejorar también mi condición física
¿Cuáles son tus expectativas de cara al futuro?
Adquirir experiencia y poder entrenar y competir en deportes de contacto, que son los que me gustan. Ahora soy cinturón negro de Karate y también quiero prepararme para competir en Kickboxing después de disputar estas finales de boxeo.
¿Cómo lleva un joven de 16 años compaginar los estudios y los entrenamientos del deporte de competición?
Supone sacrificio, pues los estudios son mi futuro, pero tengo mucha ilusión en poder compaginarlo con el deporte. Es duro, pero tengo un fuerte apoyo de mi familia, que me ayuda en todo momento.
¿Está creciendo la afición al boxeo en la Sierra de Madrid?
Pues la verdad que mucha gente me anima y es porque cada vez hay más afición a este deporte. Quiero agradecer el apoyo de toda mi familia y amigos, así como al Colegio Gredos San Diego de Guadarrama y a mis entrenadores, Borja Escriña, Fernando y David Sáez.