Alpedrete, Galapagar, Torrelodones y Collado Villalba pueden perder en mayo sus mayorías absolutas

Os teléfonos de las empresas demoscópicas especializadas en sondear a los ciudadanos para conocer su intención de voto de cara a las elecciones municipales que se celebrarán en el próximo mes de mayo están al rojo vivo. Partidos políticos, medios de comunicación, colectivos y ciudadanos han encargado la elaboración de minuciosos sondeos de opinión a fin de conocer, dentro de lo posible, cómo está actualmente el patio electoral en los municipios más importantes de la Sierra del Guadarrama. El responsable de una de estas empresas ha confesado a nuestro periódico que “las peticiones que hemos recibido hasta ahora, sobre todo por parte de medios de comunicación, superan ampliamente las habidas hace cuatro años, y dada la situación política por la que atraviesa nuestro país, me imagino que la demanda seguirá en auge hasta el último momento”.

Por otro lado, y según hemos podido saber, tanto Partido Popular como PSOE ya conocen los primeros resultados de las encuestas realizadas sobre la intención de voto de los madrileños de cara tanto a los próximos comicios autonómicos como a las elecciones locales, sobre todo en los ayuntamientos más importantes de nuestra región. Y aunque nadie quiere soltar prenda (unos para evitar que sus electores se relajen en exceso y los otros para no ir de víctimas), los cierto es que algunos sondeos, con muestras de consultas telefónicas bastante significativas, anuncian que tanto Esperanza Aguirre como Ruiz Gallardón renovarán su actual mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid y en el Ayuntamiento el próximo 27 de mayo, aunque el Partido Socialista también ha filtrado a través de algunos medios que su candidato, Miguel Sebastián, con el apoyo de Izquierda Unida, podría arrebatar la alcaldía a Gallardón.

LAS MAYORÍAS ABSOLUTAS DEL PP EN LA SIERRA
Mientras esto sucede en la capital, aquí, en nuestra comarca, ante la ausencia, al menos por ahora, de cifras procedentes de este tipo de sondeos se recurre al sentido común y éste, según todos los indicios, nos lleva a anunciar mayorías absolutas en San Lorenzo de El Escorial, donde Fernández Quejo vuelve a concurrir a la reelección como indiscutible favorito para regir los destinos del Real Sitio durante los próximos cuatro años. La crisis surgida en los últimos meses en el seno del Foro Progresista de El Escorial, colectivo formado por PSOE e IU, que derrotó al Partido Popular (recuerden la grave situación por la que atravesaba entonces la familia popular) en las elecciones celebradas 2003 junto a la unanimidad mostrada por la militancia popular a la hora de refrendar a Antonio Vicente como candidato de los conservadores a la Alcaldía de La Villa, pueden devolver al PP el control del Ayuntamiento. En cuanto a los independientes de Los Arroyos, caso de que consiguieran alguna acreditación de concejal, no creo que llegasen a formar parte del futuro gobierno, sea éste del color que sea. José María Moreno, alcalde de Moralzarzal, a priori se presenta como favorito para continuar una legislatura más al frente del Ayuntamiento de Moralzarzal, y otro tanto sucede con José Ignacio Fernández Rubio, actual burgomaestre del Ayuntamiento de Guadarrama, quien además del tirón popular que tiene en esta localidad no desaprovechará la crisis en la que se encuentra inmersa la Agrupación Socialista local para revalidar su cómoda mayoría.

RESULTADOS INCIERTOS
Sin embargo, pocos se atreven a hablar de mayorías absolutas en el resto de los municipios serranos. El independiente Juan Carlos Bustos (Collado Mediano) y los populares Joaquín Montalvo (Becerril de la Sierra), Pilar López Partida (Valdemorillo), Marisol Casado (Alpedrete) y José Luis González (Galapagar) parten como favoritos para ganar los próximos comicios, pero aún así se van a ver obligados a tener que pactar con otras fuerzas políticas (sobre todo con los independientes) si quieren mantenerse al frente de los Ejecutivos.

En Torrelodones, si se confirma la ausencia de AVIT en los próximos comicios, el PP liderado por Carlos Galbeño sólo podrá gobernar si consigue mayoría absoluta, puesto que PSOE e IU van a ir de la mano. Aquí ya se han filtrado algunos datos en los que queda en evidencia el potencial del voto popular, incluso tras las heridas abiertas por la crisis surgida en el seno del Ejecutivo allá por el mes de septiembre que acabó con la expulsión de los ediles díscolos, Tintó y Pacios, y la desbandada de aquellos que apoyaron una absurda conspiración cuyo único objetivo era apartar de la política local a Galbeño y Mingo. Por eso la sorpresa sería que los populares no renovasen su actal mayoría, aunque nadie debe confiarse.

Tampoco los socialistas villalbinos parecen estar en disposición de tirar cohetes ni tampoco de vender la piel del oso antes de cazarlo, según se desprende de los datos filtrados sobre una encuesta realizada hace unos días por el Partido Popular que, curiosamente, coincide con otra a la que ha tenido acceso este periódico, porque según esos datos el PSOE obtendría en Collado Villalba 11-12 concejales y el PP estaría en una horquilla de entre 10 y 11, es decir que ambas fuerzas rondarían el empate técnico, situación que dejaría en manos de ADEI (2-3 concejales) e Izquierda Unida (1-2 ) la responsabilidad de formar gobierno. Pero insistimos, algunos de estos datos pueden estar sustentados más en deseos que en realidades y aunque alguien pudiera dar credibilidad a estas cifras (esta semana estaba haciendo una encuesta Sigma-2 en Villalba), la verdadera encuesta es la que saldrá del recuento de las papeletas depositadas en las urnas el 27 de mayo. Hasta entonces, cada uno es muy libre de hacer cualquier tipo de pronósticos.