La Guardia Civil de San Lorenzo, clave en la desarticulación de la ‘banda del extintor’
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
La actuación de la Guardia Civil de San Lorenzo de El Escorial ha sido determinante en la desarticulación de la banda del extintor, especializada en alunizajes y robo de vehículos, principalmente en localidades del Noroeste y zonas de alto nivel adquisitivo de Madrid capital, como el entorno de la calle Serrano, donde este grupo protagonizó un espectacular asalto en la tienda de Loewe.
La Operación Troya se ha saldado con la detención de ocho personas, entre las que se encuentran los cabecillas de la organización, especializados en robos con fuerza en establecimientos por el procedimiento del alunizaje y la maza. Se les imputa la sustracción de más de 30 vehículos de lujo en el último trimestre, parte de los cuales empleaban para la comisión de los alunizajes a establecimientos, mientras que otros eran suministrados a grupos de menor entidad que también los empleaban para la comisión de delitos.
Sus objetivos eran principalmente tiendas de telefonía móvil y artículos de primeras marcas. Se les atribuye la autoría de algunos de los últimos hechos cometidos en calles céntricas de Madrid y establecimientos ubicados en localidades de la zona Noroeste de la región.
También se les imputan delitos de falsedad documental, dado que doblaban las placas de matrícula, y blanqueo de capitales, habiéndose procedido al bloqueo de bienes materiales como numerosos vehículos y viviendas.
El inicio de la operación
La operación se inició el pasado mes de julio, tras cometerse un robo por el método del alunizaje en un restaurante de Majadahonda. Las indagaciones desarrolladas por el área de investigación del Puesto de San Lorenzo del Escorial y por la unidad de Policía Judicial de la Comandancia de Madrid permitieron localizar al usuario de este vehículo, Adán S.P., un conocido y peligroso alunicero de 22 años que lleva robando desde los 14.
Continuando con las investigaciones se pudo confirmar que se trataba de un grupo muy activo de delincuentes perfectamente estructurados y organizados, liderados por un joven con un amplio historial delictivo y que habían tejido un complejo entramado, tanto para perpetrar los robos como para deshacerse de los automóviles y para el blanqueo de capitales.
Tras identificar y localizar a todos los integrantes del grupo, se procedió a la fase de explotación de la operación, que ha concluido con la detención de siete hombres y una mujer, con edades comprendidas entre los 20 y 26 años de edad, todos de origen español y que acumulan un centenar de antecedentes policiales. Los detenidos fueron puestos a disposición judicial, decretando el ingreso en prisión de seis de ellos. Los otros dos están en libertad con cargos.
Efectos intervenidos
Según explicaron la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, y el teniente coronel de la Guardia Civil y segundo jefe de la Comandancia de Madrid, José Eduardo Gómez, se han practicado un total de ocho registros domiciliarios, interviniéndose 20 vehículos utilizado por la banda para cometer sus actos delictivos. El valor de los efectos recuperados asciende al millón de euros.
También se han recuperado 10.000 euros en moneda fraccionada, decenas de bolsos de primeras marcas, numerosos relojes de conocidas firmas, 200 prendas nuevas dispuestas para ser vendidas con sus etiquetas, decenas de teléfonos móviles varios inhibidores de frecuencia, detectores de cámaras ocultas, una máquina de arrancar vehículos de lujo, extractores de bombín, llaves falsas, una pistola simulada, dos pistolas Táser y más de 500 efectos de bisutería.
Los guardias civiles también requisaron herramientas empleadas para la comisión de los delitos, tales como picos, cizallas, mazas, palanquetas, radiales o extintores, así como placas de matrículas, cajas de perfumes, 190 cajetillas de tabaco y centenares de productos cosméticos.