“Los conductores tienen que entender que esto es un pueblo, no una autopista”

Entre los puntos que se abordaron en el pleno celebrado esta semana se encontraba también la firma de un convenio con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y la Jefatura Central de Tráfico, que supondrá la instalación de un radar móvil.

La alcaldesa indicó que esta medida no tiene un afán recaudatorio, sino disuasorio, reiterando que una de las prioridades de su Ejecutivo pasa por mejorar la movilidad en Torrelodones. Para ello, se trabaja en la creación de carriles bici y sendas peatonales, además de otras iniciativas como la puesta en marcha del proyecto Camino escolar, que persigue que los alumnos vayan andando a sus centros. A esto se unirán, explicó, campañas de concienciación para “reducir la velocidad en las calles a 30 ó 40 kilómetros por hora”.
“Los conductores tienen que entender que esto es un pueblo, no una autopista”, subrayó Elena Biurrun, para quien la solución “no está en poner badenes por todo el municipio”. En todo caso, sí indicó que, en determinados puntos negros, se crearán “lomas” en la calzada para evitar que los coches alcancen velocidades excesivas.