En el desván del concurso...
Alfredo Fernández
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Los empresarios que licitan por Las Ventas emplean en estos días todas sus armas para convencer a la Comunidad, a los aficionados y a la opinión general que ellos son los mejores. Hay entrevistas y declaraciones que a uno le dejen atónito.
Se escuchan verdaderas chorradas y hasta mentiras que no se si ellos se lo creen. Se han enterado eso de que el verano venteño se soluciona con mucha publicidad. Claro que lo que deberían hacer algunos empresarios es ir más al tendido en verano y menos al callejón los días claves, y enterarse así de la triste realidad. Por cierto, ¿todavía se creen ustedes que detrás de algunas empresas no existe un socio capitalista del ladrillo que sea el que ponga la pasta? Yo no me lo creo. Porque es muy fácil el truco. Una vez concedida la plaza, realizas una ampliación de capital, cambias de nombre a la empresa como en el último concurso, modificas el accionariado y aquí paz y después gloria. Recordemos que en el último pliego, “Choperita” fue con Fidel San Román, que estuvo en prisión por su presunta vinculación con la operación Malaya. Ahora ninguno de los concursantes quiere reconocer vinculación alguna con ese apellido para no correr el riesgo de que le pongan la cruz de inmediato. Luego veremos si los supuestos tapados sacan la cabeza a la hora de la verdad o siguen sumergidos.
Por otro lado, al concurso se han presentado muy pocos empresarios, sólo tres. El pliego es una aberración y tiene una viabilidad muy complicada. A muy pocos empresarios de fuste les interesa la plaza hoy en día. La batalla está en estos momentos en el tejado de la Comunidad y tiene en plena batalla a dos licitadores: Casas y Martínez Uranga. Tomás Entero, desde mi punto de vista, pinta poco o nada en este concurso. Casi todo el mundo coincide en que no tiene experiencia, y es verdad. No se puede pasar de ser empresario de plazas de pueblo con astronómicas subvenciones a dirigir el cetro, es decir, la primera plaza del mundo. Pero si lo que ha pretendido Entero es publicidad, salir en los medios, acaparar entrevistas y que se hable de él, pues la verdad es que lo ha conseguido. Para figurar y hacerse fotos le ha valido, pero para ser empresario de Madrid creo que hay que utilizar otras vías. Que tenga suerte y demuestre su valía en otro tipo de plazas.