El Ejecutivo soluciona uno de los principales vertidos al arroyo Trofas
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
El Ayuntamiento de Torrelodones ha hecho pública esta semana la reparación del que era uno de los principales vertidos de aguas fecales al arroyo Trofas. La primera reparación importante de vertidos a este arroyo, en la urbanización Los Peñascales junto a la valla de El Pardo, la hizo el pasado mes de enero el Consistorio de Las Rozas. Como ya informó entonces El Faro del Guadarrama, la nueva Corporación roceña está demostrando interés por el problema de sus vertidos de fecales a los arroyos y atendió la petición de un vecino de Torrelodones, al tratarse de un problemático colector en el límite norte de su término municipal. Este desatranco de un aliviadero de la red directo al arroyo, hoy día fuera de normativa, ha evitado el mayor vertido, aunque no soluciona el problema a medio plazo.
Nuevos gobiernos, nuevo interés
Tras aquella denuncia vecinal, los nuevos responsables municipales de Torrelodones también se interesaron por el estado de este arroyo, tanto por su alto valor ambiental en el municipio como por el aporte hídrico que ofrece a El Pardo y al río Manzanares. Denuncia que no era nueva, sino que venía repitiéndose tanto por vecinos como por la prensa desde 2007.
A pesar de solucionar el principal vertido, las aguas del Trofas seguían bajando contaminadas hacia El Pardo, por lo que los máximos responsables del Equipo de Gobierno se propusieron localizar el origen de este nuevo vertido. Finalmente, en el valle de un arroyo menor, procedente las urbanizaciones Tikal y Miralpardo, se detectó la rotura que vertía al arroyo Trofas.
Sin embargo, como explican desde el Ayuntamiento, “el origen de dichos vertidos estuvo en sendas roturas y obstrucciones en la red de saneamiento, provocadas por la abundante vegetación, cuyas raíces han penetrado en la canalización”.
Densa vegetación
A pesar de que los puntos del vertido se localizaron a mediados de enero, las averías han tardado varias semanas en ser reparadas.
“Si bien el primero de los vertidos fue solucionado inmediatamente, el segundo exigió más tiempo, pues la densa vegetación imposibilitó el acceso de la maquinaria. De esta manera, los trabajos de reparación han sido realizados manualmente por los trabajadores de obras y servicios municipales. Las tareas de renovación, que ya han concluido, han supuesto no sólo la demolición del tramo afectado, sino también, la construcción de uno nuevo, añaden estas mismas fuentes.