Frío, muchas orejas y un buen toro de Peña en la feria de Ajalvir

Los cuatro toros de Peña tuvieron un buen comportamiento. Uno de ellos lo sorteó Javier Conde, que no pasó de una faena con algunos detalles, pero muy lejos de aprovechar al toro. A su primero no quiso ni verle y pronto tiró por la calle de en medio.

El rejoneador Joao Moura, que había estado tan frío como la tarde ante el toro de López Gibaja que había abierto la tarde, se vino arriba en el cuarto. Clavó con más acierto, se centró más y si no es por los fallos con el rejón de muerte hubiera podido cortar trofeos.

El sábado 28, se celebró un festival taurino sin picadores con la presencia de los hermanos Janeiro. El final de la carrera de Jesulín es evidente, porque resulta chocante terminar matando becerros sin picar de su propia ganadería en un pueblo en pleno invierno. Se llevó cuatro orejas en el esportón, aunque lo más brillante lo realizó ante su segundo, donde estuvo más templado y técnico.

Su hermano Víctor también se aseguró cuatro apéndices tras manejar con acierto la espada y muletear con variedad y suficiencia. César Valencia realizó lo más torero en el sexto, cortando otras dos orejas.