El debate del uso del Reajo continúa enfrentando al alcalde con la oposición

Todos los grupos, excepto el CDS y el PP, presentaron alegaciones y se opusieron al cambio del uso por considerar que el alcalde, Juan Carlos Bustos Badarey, ha tratado la modificación con “oscurantismo” y lo acusaron de “no hablar claro” sobre el fin último que se persigue con el cambio del uso. El regidor consideró que promover el cambio del uso es lo mejor para el pueblo, ya que la parcela lleva 30 años sin tener ningún fin. Dichos terrenos colindan con otra finca privada, de uso deportivo, que también se está intentando modificar. Badarey se escuda en que de los 6.000 metros públicos sólo un 0.35 por ciento son edificables, con lo que al unir las dos parcelas, se consiguen 19.000 metros, aunque no informó de cuáles eran los planes que la sociedad mercantil Club El Roble S.A., promotores de la parcela privada, porque según dijo “no lo sé”.

Esta es la segunda vez que la recalificación del Reajo va a Pleno. La primera fue en junio, cuando se publicó el convenio que el Ayuntamiento suscribió con la empresa Club El Roble con el fin de cambiar la calificación de las parcelas. Si el acuerdo llegase a buen fin y se edificarán los 19.000 metros y el Ayuntamiento percibiría el 10 por ciento del aprovechamiento resultante. La portavoz del PSOE, Josefina Leal, es partidaria de “conservar el suelo municipal para proyectos futuros” y Manuel Vemáez, de ICM, manifestó su sospecha de que el convenio partiese de la empresa y no del Consistorio.