La Asociación de Propietarios de Montencinar pide pagar las obras de urbanización “a precio de mercado”

No deja de sorprender, a pesar de la larga experiencia acumulada con los años, la inoperancia municipal para Montencinar en lo referente, también, a las necesidades primarias de este núcleo vecinal, que con la llegada de las lluvias se ha hecho completamente intransitable.

Tampoco sorprende el desarrollo de las obras de infraestructura que se están llevando a cabo a toda velocidad, ya que éstas, realizadas al parecer por Iberdrola, son de exclusivo beneficio para el casco urbano; es decir, para lo que le interesa a la actual Corporación y su proyecto estrella, que no es otro que el Ensanche.

Extraña la realización de una obra que aparentemente debe sufrir sustanciosas modificaciones, si es que algún día se realizan los trabajos de infraestructura y urbanización de la colonia Montencinar de El Escorial. Tememos los vecinos que el coste de esas modificaciones también se nos quiera cobrar, como otros capítulos, o simplemente sirva de excusa para dejarlo todo parado, como se esta haciendo en la actualidad, abandonando a cientos de familias a su suerte, lo que denota una falta de sensibilidad y hasta irresponsabilidad municipal, dados los cientos de pozos negros que existen en esta zona.

Este temor, fundado por otras actuaciones municipales cuanto menos de dudosa legalidad, se basa en el traslado de una deuda contraída por el Ayuntamiento de El Escorial con el Canal de Isabel II por importe de 50 millones de pesetas desde el 18 de abril de 1997, que debería haber sido consignada en los presupuestos de los años 1997 a 2001, lo que el Ayuntamiento no hizo.

Como en todo lo que aparezca el nombre de Montencinar es tratado de la misma manera por la Corporación, simplemente decidieron que lo pagaran los vecinos, incluyéndolo en el coste “futuro” de la realización de las obras ya aprobadas y suspendidas sine die por la interposición del contencioso administrativo presentado por la Asociación de Propietarios y admitido por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Es decir, que el Ayuntamiento contrae una deuda con el Canal de Isabel II a espaldas de los vecinos, impidiéndonos la participación activa y desplazándonos de nuestros más elementales derechos de forma permanente. Por otro lado, cosa habitual históricamente.

Ahora, en las excavaciones están apareciendo “restos de construcciones” enterradas que probablemente puedan tener un valor patrimonial. Esperemos que sean tratadas correctamente y que, una vez terminadas las obras de alta tensión que cruzan enterradas por medio de la Colonia de Montencinar, no vayan a ser objeto de controversia, y sobre todo que, ya que no nos arreglan ni un metro de las calles, al menos nos las dejen como estaban, pues algunas zanjas atraviesan las únicas zonas que asfaltamos los vecinos con nuestro dinero hace ya años.

Sola nos queda, nuevamente, hacer saber a la opinión publica que queremos pagar nuestras obras de urbanización a precio de mercado, sin partidas engordadas o innecesarias, y que los responsables de esta paralización son otros ajenos a Montencinar.

Junta Directiva de la Asociación de Propietarios de Montencinar