Mucho público y varios apuntes de interés en Becerril de la Sierra

Novillada Concurso de Ganaderías. Sábado 17 de septiembre. Casi lleno. Novillos de distintas ganaderías, de buena presencia, aunque desigual tipología. De poco juego en general. Mercedes Figueroa, parado y descastado; Antonio San Román, bonito, bravo en varas y complicado; Hermanos Quintas, incierto, sin humillar y poca raza; Hermanos Pérez Villena, alegre en varas y descastado; El Verdinal, devuelto por inválido; García Ibáñez, flojo y noble; el sobrero de Pérez Villena, descastado y parado. Sergio Blasco, silencio y oreja; Mathieu Guillon, bronca y pitos y Fernando Adrián, oreja en ambos.

Becerril de la Sierra es un municipio donde va la afluencia de público es numerosa y merece hacer las cosas con categoría.La Comisión de Festejos trabaja con esfuerzo, el Ayuntamiento apoya la Fiesta y es por ello que es una feria para cuidar y ofrecer calidad.

La novillada picada prevista para el pasado sábado resultaba, al menos, curiosa. Novillos de vacadas de la comarca entraban en liza. Buena presencia de todos los utreros. Ni un pero. Pero también mucho descastamiento y flojedad en el ganado. La mayoría de las divisas serranas no atraviesan su mejor momento, tal como hemos visto el pasado fin de semana en Becerril y Los Molinos. Ni uno mereció el trofeo.

Hay excepciones ganaderas en la comarca, pero en general les falta casta y bravura para competir con otras. Es la gran verdad.

Por otra parte, a los novilleros tampoco les sobró nada. Más bien les faltó. Salvo la tarde con mucha dignidad Fernando Adrián, que puso mucho de lo que carecía el novillo de Quintas para agarrar el triunfo. La espada viajó bien y cortó la oreja. También supo sujetar con cabeza y técnica a un precioso utrero de García Ibáñez que besaba la arena en cuanto se le obligaba. Mató bien.

La actitud de Mathieu Guillon fue insultante. No se puso ni una sola vez con un novillo de San Román que pedía firmeza y apostar, mientras que al sobrero de Pérez Villena no quiso ni verle. Sobran novilleros con esta disposición tan mala en un municipio que promociona la Fiesta. Sergio Blasco tampoco brilló. Anodino con el novillo que abrió la función, terminó cortando una generosa oreja ante un ejemplar de Pérez Villena al que mató a la primera, pero con el que no pasó de aseado. Sólo hay que valorarle lo mucho que lució al novillo, aunque éste luego no respondiera.

El domingo 18 de septiembre, se puso broche a la feria con un festival taurino sin picadores en el que se lidiaron novillos de Baltasar Ibán, que dieron buen juego.

Iván Vicente desorejó a su utrero, al igual que el novillero Gonzalo Caballero, que resultó el triunfador del Certamen de Novilleros Niño de la Palma, celebrado en esta plaza serrana el viernes 16 de septiembre. Saltó al ruedo un completo lote de Hermanos González Rodríguez. Un trofeo pasearon en este festival Fernando Cruz, Fernando Robleño y Sergio Marín, mientras que Pablo Lechuga fue ovacionado.