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El Ayuntamiento de Valdemorillo ahorrará 150.000 euros al año en el sueldo de sus cargos públicos

Por CARLOS FERNÁNDEZ
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
A pesar de haber pasado de 13 a 17 concejales, la nueva Corporación municipal de Valdemorillo costará 150.000 euros menos al año tras aplicar el nuevo Ejecutivo importantes ajustes en el sueldo de los ediles. Así, tal y como se aprobó en pleno, hasta cinco concejales del Equipo de Gobierno cobrarán únicamente dietas por asistencia a plenos, comisiones, mesas de contratación y otros actos institucionales. Respecto a la oposición, pierden sus privilegios al dejar de cobrar un fijo mensual para cobrar por asistencia a plenos y otros actos, tal y como ocurre en otros muchos ayuntamientos.

Sólo la alcaldesa, Pilar López Partida (PP), la vicealcaldesa, Carmen Villanueva (PIVALDE), que percibirán 61.000 euros anuales, tres tenientes de alcalde, que rebajan su sueldo un 16,5 por ciento, y una edil del Ejecutivo estarán en el régimen general de la Seguridad Social esta legislatura. En total, según informó la concejala de Hacienda, el nuevo sistema de retribuciones supone pasar de un gasto anual en la pasada legislatura de 464.000 euros para trece concejales, a estimar un coste de 395.000 para 17.

La alcaldesa recalcó en la sesión plenaria que “de haber seguido con el sistema de retribuciones existente la nueva corporación hubiera costado más de 600.000 euros al año, por lo que esta nuevo procedimiento ahorra 150.000, casi 100 millones de las antiguas pesetas para toda la legislatura. Hemos querido dar ejemplo de austeridad con esta reducción”. López Partida insistió en que estas retribuciones son por el total del trabajo efectuado, ya que “en este Ayuntamiento no hay gastos de representación o coches oficiales, de modo que lo que se ingresa es en concepto de sueldo, desplazamiento y todo lo que supone ejercer el cargo de concejal. Aquí no tenemos presupuestos para comidas, cada uno se paga lo suyo. No hay tarjetas del Ayuntamiento, ni de gasolina”, afirmó la regidora de Valdemorillo.

Las nuevas retribuciones suponen una rebaja del 5 por ciento para el sueldo de la regidora, que percibirá unos 3.000 euros netos al mes, igual que la vicealcaldesa. Más pronunciada es la bajada en el salario de los tenientes de alcalde, que percibirán un máximo de 35.000 euros, un 16,5 por ciento menos que la pasada legislatura. Para los ediles del Equipo de Gobierno con dedicación exclusiva se establece un máximo de 26.000 euros anuales y para los de dedicación parcial, el tope se fija en 18.000 por todos los conceptos.

Críticas de la oposición
La reducción afecta también a los concejales de la oposición, que pasan de cobrar una cantidad fija al mes de alrededor de 1.000 euros a percibir honorarios en función de la asistencia a plenos, comisiones informativas o mesas de contratación. Los concejales de Partido Progresista de Valdemorillo (PVM), PSOE e IU-Los Verdes votaron en contra.

Hasta tal punto llegó la indignación de la edil de Progresistas Gema González que pidió en nombre de su grupo la retirada del punto para retrasar la decisión hasta el próximo pleno, previsto para el 18 de julio, al considerar que la reasignación de retribuciones no era de carácter urgente. La concejala manifestó que esta medida ha dejado casi sin sueldo a los concejales de la oposición, lo que en su opinión es “tener poca vergüenza o más bien ninguna”. Charo Cámara, portavoz de IU, ratificó lo dicho por la edil progresista para ir más allá en sus apreciaciones al referirse a la medida como “un golpe de estado”.

Más comedidas fueran las críticas del portavoz socialista, Vicente Bernal, que aseguró no estar en política por interés económico. No obstante, quiso constatar su disconformidad al no haberse producido la reducción de una forma lineal para toda la Corporación, sino de un 5 por ciento para la Alcaldía, un 16 para los tenientes de alcalde y entre un 60 y un 70 para los ediles de la oposición.

El ataque personal de Gema González tuvo su respuesta desde las filas de PIVALDE. A Carmen Villanueva, contra la que fue dirigida casi toda la critica de la edil progresista, le sorprendió la actitud de la concejala, ya que “ésta y su compañero de partido, Manuel Franco, habían cobrado en la pasada legislatura 62.000 euros cada uno sin merecerlo, sin asistir a los plenos, comisiones y actos propios de la oposición. Han estado ustedes cuatro años rascándose la nariz. A lo mejor cobrando de esta forma aparecen por el Ayuntamiento, ya que si no vienen, no cobran. Así de sencillo”.
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