El colegio Zola se instalará en los terrenos junto a la plaza de toros
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Como ya adelanto este periódico, el colegio Zola es el centro privado que se instalará en los terrenos situados junto a la plaza de toros La Candelaria de Valdemorillo, en la intersección con la carretera de Cerro Alarcón. La decisión se tomó en una mesa de contratación celebrada el pasado día 23 de diciembre y se consolidará en un pleno extraordinario el próximo día 5 de enero. PIVALDE insiste en que estamos ante “un proceso lleno de irregularidades para favorecer los intereses de la promotora Afar-4 y el colegio Zola”.
Una vez visto el proyecto que se presenta, que la concejala de este grupo no duda en calificar de “horrible y poco adecuado al entorno porque más parece una nave industrial que un colegio”, Carmen Villanueva tiene claro que “se saltan las Normas Subsidiarias para dar mayor edificabilidad de la permitida”. Como ejemplo, señala que el alero “se eleva a 8,20 para dotar al edificio de cuatro plantas, algo que no esta permitido con la actual normativa. Es sorprendente que el colegio vaya a tener 5.477 metros cuadrados y de ellos 2.840 no sean computables porque van enterrados o semienterrados. El colmo es que, como faltan metros al tener el solar solo 8.000, menos de lo permitido, se van a instalar pistas de pádel en la cubierta lo que en la práctica da no cuatro, sino cinco plantas”.
Invasión de zonas verdes
Según Carmen Villanueva, “el propio colegio reconoce textualmente que se trata de un solar de reducidas dimensiones, por lo que no dudan en invadir, con el permiso del Ayuntamiento, más de 600 metros cuadrados de zona verde pública y la vía pecuaria, diciendo que la intervención no queda limitada al solar, sino que influye en el entorno cercano del colegio. Esto es una vergüenza. Se esta permitiendo al centro y al constructor invadir para su uso una zona que es de todos los vecinos y hasta la vía pecuaria. No sólo se saltan las Normas Subsidiarias, sino que van a usar los parques de todos para que el colegio se lucre en un negocio privado”.
Para la concejala, todo el concurso esta amañado y “buena prueba de ello es que se ha permitido que el aval se entregue en metálico. A mí como concejala no se me ha presentado ningún justificante de ingreso, se han limitado a decir que el dinero esta ingresado. Y, lo que es más grave, se han modificado las condiciones del pliego, rebajando el canon de 11.000 a 5.000 euros al año”. Finalmente, la edil indica, “como siempre hemos mantenido”, que “no se trata de un línea tres (tres aulas por curso), sino dos, y el propio centro lo reconoce en su calendario de instalación”.