El alcalde de Fresnedillas defiende la ubicación del nuevo colegio público

El regidor asegura que la ampliación que proponía el anterior Equipo de Gobierno y que defiende la oposición socialista es imposible. “Cuando ganamos las elecciones nos encontramos con el expediente para la ampliación del colegio en el pinar. Para hacer el centro había que talar 650 pinos y doblar la edificabilidad. Desde la Comunidad de Madrid nos dijeron que jamás en la vida darían permiso para esta tala, por lo que tuvimos que buscar otra ubicación”.

El alcalde reconoce que el lugar donde en breve se comenzara a edificar el colegio ha tenido 22 alegaciones por estar en Zona de Especial Protección Aviar (ZEPA), pero manifiesta que se han resuelto satisfactoriamente. “Todo Fresnedillas de la Oliva es ZEPA, incluso el Ayuntamiento y la plaza del pueblo; por lo tanto, la parcela donde se va a construir el colegio también lo es y va a seguir siéndolo. Sólo se desprotege la superficie donde se ubica el centro o los equipamientos previstos, pero no el resto del solar”.

Reguilón no quiere responsabilizar a nadie de que, ahora, en un primer momento sólo se construyan tres de los cinco módulos previstos, pero asegura que el retraso en el inicio de las obras debido a las alegaciones y los ocho meses perdidos en este proceso han hecho más difícil obtener la financiación necesaria de la Comunidad de Madrid debido a los problemas económicos actuales. El nuevo colegio tendrá tres módulos y un comedor donde, en principio, se albergará a parte de los escolares de Fresnedillas hasta que se construyan los cinco módulos proyectados.
“La construcción del colegio era nuestra primera prioridad cuando nos presentamos a las elecciones y aquí esta. Lo que no podía ser es que el centro educativo actual esté albergando 150 niños cuando sólo está para 90. El curso que viene no será así, el colegio no estará colapsado y contaremos con las instalaciones adecuadas”, afirma el alcalde de Fresnedillas.

Una prioridad
Respecto a los padres y madres que protestan porque quizá tengan a sus hijos escolarizados en dos centros escolares diferentes, el alcalde jarando entiende las molestias, pero asegura que, “en todo caso, será un problema transitorio hasta que se inauguren los cinco módulos previstos. Hemos elegido la zona del campo de fútbol para la instalación de equipamientos deportivos y sociales y para eso el Ayuntamiento ha comprado los 38.000 metros cuadrados que lindan con el casco urbano”.