Dos corridas de toros y tres novilladas con picadores conforman el ciclo. En las corridas de toros, el epicentro es Antonio Ferrera, este año fuera de muchas ferias, entre ellas Madrid, pero triunfador muchos años Collado Villalba. Luego nos encontramos con toreros dignos como Juan José Padilla, Iván Fandiño o José Luis Moreno, pero que quedan por debajo de la feria, y más con la trascendencia que muchos quieren pregonar, aunque lo de comulgar con ruedas de molino se antoje cada vez más difícil.
Villalba merece otros carteles
Collado Villalba merece otros carteles mucho más rematados y con otros ingredientes. La clave es que a lo mejor el empresario no quiere hacerlos porque le cuestan más y así ahorra mucho dinero.
Esa es la gran verdad, conocedor de que Ayuntamiento, comisión y parte de la prensa local tolera y apoya todo. Cuando no hay oposición, se cae en el abuso. Clama al cielo que con la subvención que da el Ayuntamiento luego no sea capaz de exigir mejores toros y toreros.
Lo más atractivo: las novilladas
Habría que hablar en primer lugar de la ausencia más importante, la del charro Juan del Álamo, el novillero de más ambiente del momento, aunque parece que esto no ha sido bastante para que el empresario haya contado con él. Y hay que decir también que a este novillero de tanto valor no le asustan las ganaderías ni las puntas de dos de las novilladas que se anuncian. Las cosas claras.
Pero dejando aparte a Juan del Álamo, a la feria vienen novilleros muy interesantes, que se convierten en lo poco positivo que tiene este ciclo de Santiago Apóstol 2010.
Se anuncia Víctor Barrio (triunfador en Madrid, Guadarrama y Collado Mediano); López Simón, que tiene muy buenas condiciones y al que apodera el empresario; también otro novillero de buen corte como Arturo Saldívar, y sin olvidarnos de Mario Alcalde o la esperanza del local Eduardo Pereira.
Los carteles han quedado resueltos de la siguiente manera.
Jueves 22 de julio. Novillos de Los Bayones para Gómez del Pilar, López Simón y Adolfo Ramos.
Viernes 23. Novillada Concurso de Ganaderías. Concha y Sierra, Prieto de la Cal, Sotillo Gutiérrez, Dolores Aguirre, José Escolar y Antonio San Román para Javier Herrero, Arturo Saldívar y la novillera Conchi Ríos.
Sábado 24.Corrida de Toros con astados del Conde de la Maza para Juan José Padilla, Iván Fandiño y José María Lázaro (torero de capacidad, pero del que no entendemos su inclusión en esta feria).
Domingo 25.Corrida de Toros con ejemplares de Peñajara para Antonio Ferrera, José Luis Moreno y Morenito de Aranda.
Lunes 26.Novillada con Picadores. Utreros de Monte de la Ermita para Víctor Barrio, Mario Alcalde y el villalbino Eduardo Pereira, que debuta con picadores.
Los festejos comenzarán a las siete de la tarde.
las ganaderías, la baja reducción de precios y el “nuevo encierro”
Las ganaderías también son muy mejorables en muchos aspectos. Destaca la novillada de Los Bayones, un hierro que está embistiendo y volviendo por sus fueros y, que a priori, es la divisa más fiable del serial. La otra, de Monte la Ermita, echa de todo.
Las corridas tienen su peligro. Peñajara viene de lidiar una gayumbada en Pamplona y se está recuperando de un problema de hígado y fuerzas que la ha ahuecado de las ferias.
El Conde de la Maza es un hierro duro que el pasado año echó una corrida deslucida, aunque este año en Sevilla se ha movido mucho.
La novillada concurso es atractiva, si quitamos a San Román, que la meten sigilosamente a ver si medio sale y al año que viene cuelan una corridita de las suyas, y Sotillo Gutiérrez, que no pinta nada en este concurso. Las otras ganaderías tienen interés y apetece ver a Escolar y Prieto. No viene la triunfadora de 2009, Rivera de Campocerrado. Mejor, no se tuvo en pie y menos un toro fue floja y baja de raza.
Me cuentan que las corridas vienen justitas de presencia.
Los precios han sufrido una mínima reducción a pesar de la crisis. 10 euros en las corridas de toros y novilladas, pero la rebaja en la calidad del producto que se oferta ha sido mucho mayor. Un abono para desempleados a 45 euros me parece poco descuento. A las peñas sólo les aplica una rebaja de 2 euros. Salen perdiendo. Como este año no hay mucho que “vender”, anuncian “encierros al estilo de Pamplona, todos en manada”. Me parece una “paletada” como una catedral de grande. Un encierro se consigue con esfuerzo, años, trabajo y solera. Ningún pueblo de la Sierra se atreve a compararse al más grande.
Ausencias y otros carteles
La feria y la subvención que hay de por medio deberían merecer algo más que lo presentado. Toreros de un nivel superior deberían estar en Santiago Apóstol. No los traen porque no se les paga su caché. No hay más. También triunfadores de Las Ventas, revelaciones, promesas. Imaginación.
Un ejemplo: El Fandi es un torero que encaja perfectamente en esta feria amable y que esta tres puntos por encima de todos los diestros que se anuncian. El miércoles toreó en plaza portátil, en Navas del Marqués. Si lo hace en esta localidad abulense, ¿no puede torear en Villalba? ¿tiene la feria más categoría? Seguramente sus honorarios sean más altos.
Tampoco aparece por la feria el triunfador de la pasada edición, Daniel Luque. El año pasado era muy bueno para algunos, este año no lo debe ser tanto, ¿no? Para mí es el mismo y merece un hueco. Puestos a ser justos, y sin caer en la tentativa de exigir que vengan figuras a una portátil, sí merecen un hueco triunfadores de Madrid. Mismamente Rafaelillo, Miguel Tendero o Leandro, otro joven que sabe torear bien. O Curro Díaz, que es una delicia y triunfó en 2009.
No puedo olvidar a otros, como Rubén Pinar, y hasta los mediáticos que venían otros años como Rivera, El Cordobés, que aunque no nos gusten quizá cobren más que juntando a los tres que se anuncian en la corrida del 24 de julio y tienen un tirón popular grande.
Y otro detalle resaltable: Miguel Abellán ha venido muchos años a Villalba y ha dejado memorables faenas. Pues bien, ahora año que esta echando su mejor temporada y cuaja la mejor faena de un mes de toros en Madrid, van y le dejan fuera. Y quede claro que los que vienen merecen todo mi respeto.