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EL CONSEJERO JOSÉ IGNACIO ECHEVARRÍA INAUGURA LOS TRABAJOS

El responsable regional de Transportes, con los alcaldes de Collado Mediano, Becerril, Alpedrete y Navacerrada
El responsable regional de Transportes, con los alcaldes de Collado Mediano, Becerril, Alpedrete y Navacerrada

La Comunidad elimina tres puntos negros en la M-601 y la M-863 tras invertir 1,1 millones

Se han creado nuevos accesos a Becerril de la Sierra y la urbanización Reajo del Roble

miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
La Comunidad de Madrid ha finalizado las obras para eliminar tres tramos peligrosos en las carreteras que conducen a varios municipios de la Sierra madrileña y al Puerto de Navacerrada. Así, en la M-601, en una zona que registraba una siniestralidad ocho veces superior a la media de la red, se han construido dos nuevos accesos, uno para girar hacia Becerril de la Sierra y otro para acceder a la urbanización Reajo del Roble. A estas actuaciones hay que añadir la supresión de otro punto conflictivo en el acceso al polígono industrial San Ildefonso, en Collado Mediano.
El consejero de Transportes e Infraestructuras, José Ignacio Echeverría, inauguró estos nuevos accesos, para los que el Gobierno regional ha invertido más de un millón de euros y que van a beneficiar directamente los vecinos de Collado Mediano, Navacerrada y Becerril de la Sierra, además de la los habitantes de otras localidades cercanas, como Alpedrete o Collado Villalba.

Elevada siniestralidad
En el punto kilométrico nueve de la carretera que conduce al Puerto de Navacerrada, la M-601, se han sustituido dos enlaces peligrosos que conectaban esta vía con la urbanización Reajo del Roble y con la M-861 a Becerril de la Sierra, por intersecciones más seguras. Esto ha supuesto, según explicó Echeverría, la supresión de un tramo de concentración de accidentes que registraba una siniestralidad ocho veces superior a la media.

En total, se ha actuado sobre 1.000 metros en los que se han construido carriles centrales y de aceleración y desaceleración para facilitar los enlaces, tanto con las urbanizaciones como con Becerril. Con esta obra se intenta evitar que los conductores realicen maniobras peligrosas, y puedan incorporarse y salir de la carretera de Navacerrada con total seguridad.

Además, se han acondicionado las paradas de autobús existentes, dos en el acceso a la urbanización Reajo del Roble y una más en la intersección con la M-861, frente al embalse de Navacerrada, construyéndose apartaderos y aceras que canalicen los movimientos de los viajeros. Para esta obra, la inversión ha sido de 719.661 euros.

Las obras en Collado Mediano, que han supuesto una inversión de 288.875 euros, han mejorado el acceso al polígono industrial de San Ildefonso. Para ello, se ha habilitado un carril central para girar a la izquierda para los vehículos procedentes de la M-601. Igualmente, se han acondicionado las paradas de autobús afectadas y se han ampliado las aceras. “De esta manera los autobuses que recogen pasajeros no obstruyen la carretera y las personas que esperan están más seguras, con una adecuada separación de la calzada”, explicó José Ignacio Echeverría.

Según el consejero de Transportes e Infraestructuras, estas obras, aunque pueden parecer menores, son esenciales para garantizar la seguridad vial tanto de conductores como de peatones, y puso como ejemplo la importancia de la construcción de este nuevo acceso al polígono industrial, pues por aquí circulan más de 600 camiones diarios.

El acto contó también con la presencia del director general de Carreteras, Borja Carabante, así como de los alcalde de Collado Mediano, María Rubio; Becerril de la Sierra, José Conesa; Alpedrete, Marisol Casado; y Navacerrada, Pablo Jorge Herrero, quien actuó como portavoz de todos ellos para agradecer a la Comunidad de Madrid la ejecución de estos proyectos, demandados desde hace años por los ayuntamientos afectados.
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