El toro ‘Navegante’ que hirió al diestro era muy serio y ofensivo
Experimenta una notable mejoría
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
El pasado martes, José Tomás, mostró una evolución espectacular. Abandonó la UCI y pasó a una habitación en planta. El torero ya se encontró con un ánimo sorprendente y comenzó a ingerir alimentos sólidos y hasta una Coca Cola. Se le hizo una prueba para comprobar que el riego sanguíneo de la pierna marchaba bien, y se corrobora que iba perfecto. Tanto es así, que incluso se le ayudó a levantarle de la cama y a dar pequeños paseos por el pasillo, algo difícil de creer ya que no habían pasado aún 72 horas desde el percance. Los médicos todavía se muestran sorprendidos por la evolución y le comenzaron ya a suministrarle antibióticos vía oral.
Al cierre de esta edición de El Faro del Guadarrama, la mejoría era espectacular. El diestro mueve la pierna perfectamente, puede andar con normalidad y ha pasado de la cama al sillón. Su ánimo es excelente y las vistas de recuperación, si todo sigue así, son magníficas y llenas de esperanza.
Junto al torero, no se ha separado ni un momento su padre, José Tomás Román, que ha sufrido un calvario, al igual que su cuadrilla, sus amigos, y todos los que vivieron esos duros momentos que jamás podrán borrar de sus mentes.
Todos hemos pasado momentos de tristeza y ahora todos podemos estar contentos porque José Tomás ha salido por la mayor puerta grande: la de salvar milagrosamente su vida. Seguro que pronto saldrá a hombros de otras muchas, pero esta era la más complicada y, una vez más, ha lidiado el mejor toro de su carrera. Crece así la figura y la leyenda de un diestro que quiere vivir y no morir en las astas del toro.
‘Navegante’, un toro muy serio
El toro que hirió a José Tomás era un animal muy serio. Tenía cuajo, culata, era fuerte y dos pitones para adelante bien puestos y astifinos. José Tomás está empeñado en dignificar la emoción de la Fiesta en México y por eso apuesta por lidiar un toro así.
Aún es pronto para hablar de la reaparición
Todavía es pronto para hablar de una posible reaparición del torero. Han pasado muy pocos días y aunque es sorprende su recuperación, aún deberá pasar un tiempo. El gravísimo percance que ha sufrido requiere que los plazos se vayan cumpliendo con tranquilidad. Bien es verdad que cuando ocurrió se llegó a temer lo peor, pero pasados los días, y si todo sigue su curso, José Tomás volverá a los ruedos y es algo para que todos lo celebremos y estemos de enhorabuena. No se puede especular y hay que tener paciencia y que se vayan cumpliendo los plazos porque el percance ha sido gordísimo. El apoderado del de Galapagar, Salvador Boix, ya ha comentado que es algo que aún ni se plantea y hay que esperar las próximas semanas, que serán trascendentales para el futuro.
Hace 16 años, otra tragedia
Esta es la segunda cornada más grave que sufre José Tomás en toda su carrera, entre las muchas que lleva. En febrero de 1994 en Autlan de la Grana, también en México, cuando apenas llevaba dos meses de alternativa, tuvo un percance muy parecido a este de Aguascalientes, también en su pierna izquierda.
Aquella dura tarde necesitó varias transfusiones y el que entonces era su apoderado, Santiago López, tuvo que donarle su sangre. En la enfermería sufrió dos paros y también se temió por su vida.
José Tomás reapareció ese año en San Isidro y triunfó por todo lo alto.
El de Galapagar está más que probado y ya ha vivido en sus carnes el tener que superar una cornada de estas características. Tampoco podemos olvidar la gravísima cornada que sufrió en la Monumental de México el día de su alternativa, donde también se vivieron escenas de mucha tensión. Así las cosas, no es aventurado decir que José Tomás ha nacido tres veces: en Galapagar, en Autlan de la Grana y el pasado 24 de abril en Aguascalientes.