Razones de San Isidro

Los mil millones de canon que la empresa paga a la Comunidad de Madrid por el piso de plaza es una barbaridad. Luego hay que mantener la deficitaria temporada de marzo a octubre, pagar el alto caché de las figuras y la empresa se tiene que llevar algo. Al final, hay que elaborar un abono a bajo coste para soportar este lastre. Los toreros prescindibles se convierten en los más rentables. Si la empresa no lo hace, los números no cuadran y palma dinero. Si nos ponemos en plan aficionado, la cosa varia, porque se paga un largo abono cautivo y se exige calidad. De las primeras figuras, sólo va a tres tardes Sebastián Castella, y en un abono tan largo se echa de menos que el núcleo principal de arriba esté en alguna otra ocasión.

San Isidro siempre ha sido un serial de oportunidad. Madrid es el salvavidas al que se agarran muchos coletas para salir del anonimato. Están muy bien este tipo de carteles, pero son ya demasiados. Últimamente venimos observando un dato: hay ciertos toreros de segunda o tercera fila que tienen un mejor o peor trato dependiendo de quién les lleve. Esto es injusto. No se tienen en cuenta sus méritos, sino los intereses de los despachos.

Habiendo carteles sueltos muy buenos, siempre que sale una feria se habla de los que no están. Enrique Ponce ha pedido unas condiciones económicas como para no venir. La ausencia más significativa es la del rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza. Nadie puede dudar que es el mejor torero a caballo de todos los tiempos. No se le ha tratado con la categoría que merece.

Otro torero que se ha quedo fuera es Antonio Ferrera. La afición de Madrid siempre ha sido hostil con él, pero tiene cabida antes que otros. Tampoco están nombres como Miguel Ángel Delgado, El Payo, Antonio Barrera, Iván Vicente o hasta Frascuelo, que siempre cae bien en Madrid. ¿Acaso tienen más méritos Padilla, Eugenio de Mora, Iván García o Gabriel Picazo? En ganaderías también faltan un puñado. A la jugarreta que la empresa ha hecho a La Quinta, se suman otros hierros como Escolar, Fuente Ymbro, El Pilar, Miura o Victorino Martín. La pasada semana hablábamos de nueve carteles redondos y una docena que tienen interés. Eso sí, la feria del Aniversario este año la aguanta José Tomás. Alrededor de su presencia se han montado carteles flojos. Habilidad empresarial.