Más ventas, pero menos recaudación

Aún así, el aumento de las ventas sigue sin estar equiparado a la recaudación: “Se venden más artículos, pero de menor precio”, nos comentaba este misma semana un conocido comerciante de Collado Villalba, un municipio que cuenta actualmente con dos centros comerciales (Los Valles y Planetocio), y aún así su alcalde sigue obsesionado en promover desde el propio ayuntamiento una tercera gran superficie, algo que, al menos últimamente, parece bastante complicado si tenemos en cuanta, por un lado el contencioso administrativo presentado recientemente por Ecologistas en Acción contra el Plan Parcial aprobado por este Consistorio con la única intención de facilitar dicha implantación en los terrenos de propiedad municipal situados junto a la A-6 y, por el otro, está la difícil situación por la que atraviesan algunos de estos grandes centros donde- como recogía este fin de semana el suplemento ‘Mercados’ del diario El Mundo- la recesión está vaciando las grandes superficies de clientes y tiendas. Es más, según dicho informe, “la crisis económica y el desplome del consumo ha puesto en un brete los nuevos proyectos comerciales planificados en diferentes regiones y que deberían ponerse en marcha en los próximos dos o tres años. Tanto es así que una buena parte de los 30 nuevos centros han quedado paralizados y otros muchos han retrasado su inauguración ‘sine die’. Por tanto, el proyecto del futuro centro comercial villalbino, y esto lo digo con la única intención de animar a aquellos comerciantes que puedan sentirse directamente afectados, no me parece viable a corto plazo.

Atracón de controles de alcoholemia en estas fechas

La Dirección General de Tráfico tiene previsto realizar hasta el próximo día 20 al menos 300.000 controles de alcoholemia, en lo que califican como una nueva campaña de vigilancia y concienciación sobre los efectos del alcohol en la conducción. Aún así, durante el resto del mes continuarán los controles con el fin de disuadir a los conductores a excederse en la bebida en fechas tan proclives para los excesos. Me viene ahora a la memoria el viejo consejo que hace años nos daba través de la televisión el cantante Stevie Wonder, que chapurreaba el conocido“si bebes, no conduzcas”, porque beber y conducir suele ser sinónimo de accidente y, por tanto, tomar unas copas es incompatible con ponerse al volante. La prueba de todo ello nos viene servida a través de los fríos datos facilitados por el Instituto Nacional de Toxicología, en los que se puede apreciar que el 31 por ciento de los conductores fallecidos el pasado año tenía un índice de alcohol igual o superior a 0,3 gramos por litro, lo que supone que en al menos un tercio de los accidentes mortales el alcohol se convirtió en factor desencadenante.

Todos sabemos que estas fechas son proclives a los excesos, tanto en las comidas como en la bebida, y si uno no tiene fuerza de voluntad para evitar el desenfreno, lo mejor es que deje el coche en casa y use el transporte público. Lo contrario le puede costar caro.

La salvaje agresión sufrida por Hermann Tertsch

En relación con la brutal agresión sufrida por el periodista Hermann Tertsch, director del ‘Diario de la Noche’ de Telemadrid, por la acción cobarde de un energúmeno, no se me ocurre una mejor manera de condenar este acto que reproduciendo el artículo publicado sobre este caso por ‘internetpolítica.com’:“Yo no sé si a Hermann Tertsch le pegaron por sus opiniones o porque pasaba por allí. No lo sé yo ni lo sabe nadie, excepto el energúmeno que le dio una patada en la espalda y le rompió varias costillas. Por eso es penoso ver cómo unos y otros olvidan el dato único que sabemos: que una persona ha sido agredida gravemente en la calle en Madrid y por la espalda. Que encima de su agresión tenga que aguantar puñaladas traperas de personajes zafios de segunda clase -periodistas, se dicen- que encima ponen en duda la agresión, la comprenden, la “contextualizan”, la ríen a hurtadillas... da la medida exacta de la miseria moral que se ha instalado en este país. Políticos y periodistas, en culpable connivencia”.

Aunque uno esté ya de vuelta de casi todo, jamás entenderé que alguien pretenda acallar la libertad de expresión con el uso de violencia .