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Una original alternativa son los menús degustación que ofrecen algunos establecimientos de la Sierra

miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Otro veterano restaurante que nos ofrece menús especiales para eventos y comidas de empresa es Viva Galicia. Situado en la carretera M-510 de Galapagar a Guadarrama, en este establecimiento se puede disfrutar de la cocina gallega clásica y actualizada, “siempre con alimentos de primerísima calidad”, resalta su propietario, Plácido. En Viva Galicia disponen de salones con capacidad para más de 350 personas; además, si el tiempo lo permite se puede disfrutar de la naturaleza en la terraza exterior, un marco inigualable para sus celebraciones -bodas, comuniones, banquetes, reuniones de empresa y otros eventos-, con amplios menús a su medida. Entre sus especialidades encontramos, como no podía ser de otra manera, una amplia gama de marisco: nécoras, centollos, buey de mar, zamburiñas, o las sabrosas gambas y cigalas a la plancha. En cuanto a las carnes, desde los fogones del Viva Galicia nos proponen el chuletón o el solomillo de buey de la casa, así como la paletilla o pierna lechal. En el apartado de pescados se puede optar por unas ricas cocochas, cogote de merluza, lubina o besugo a la espalda, por destacar algunas de las especialidades dentro de una amplia gama de pescados.
Por otra parte, en El Portón de Guadarrama disponen de instalaciones habilitadas para eventos de empresa con capacidad para 80 personas y ofrecen menús para grupos a partir de 35 euros por persona. Entre las especialidades de este restaurante, situado en la calle San Macario (frente a Reciclaje), destacan los tacos de merluza con calamares en su tinta, el chuletón de cebón o las anchoas de Santoña sobre fondo de tomate triturado, además de platos tradicionales como croquetas o boquerones. Todo ello en un acogedor local, con techos altos y vigas al aire.

Aunque la mayoría de las personas prefieren menús completos, compuestos por entrantes, carne o pescado, pan, bebida y postre, existen otras alternativas como los menús degustación. En este sentido, destaca el restaurante Baluarte de San Lorenzo de El Escorial. Los amantes de la originalidad y los sabores nuevos¡ no pueden dejar de visitar este establecimiento, situado en la calle Francisco Muñoz (detrás del mercado municipal, en el local del antiguo Amets), que ha iniciado una nueva andadura de la mano del joven cocinero Rafael Barral, quien elabora una cocina mediterránea con influencias catalanas y originales toques de autor. La afición a los fogones le viene de pequeño: “Me gustaba mirar a mi madre cómo cocinaba, sin importarme el tiempo que tardase en preparar las viandas, siempre me quedaba hasta el final”, manifiesta Barral, que decidió cursar estudios de hostelería de grado superior, recibiendo clases de cocina de Yolanda Fernández, gran cocinera galardonada con una estrella Michelín.
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