ADEC traslada al concejal de Urbanismo el temor de los comerciantes a las obras

“La gente huye de las zanjas, del polvo y de tener que andar saltando para poder llegar a comprar el pan, y aunque el concejal nos ha dicho que no se van a producir las mismas molestias que en Honorio Lozano, no queremos que los comercios de la calle Real acaben tan hundidos como los de este eje”.

Esperando las propuestas
La presidenta explicó que aunque “el concejal nos dijo que no nos podía dar mucha información hasta que llegasen las propuestas de las empresas de cara al desarrollo de este proyecto, sí que nos aseguró que los trabajos empezarían en mayo y finalizarían en diciembre, aunque la ley permite que por circunstancias excepcionales haya prórrogas de tres meses. Además, con casi total probabilidad se desarrollará por tramos”.

Los trabajos en la calle Real, con un presupuesto de algo más de 2 millones de euros, financiados a través del Plan Zapatero, prevén una reforma en cota cero de las aceras, nuevo mobiliario urbano, una red separativa de aguas pluviales y al acondicionamiento de un área infantil, entre otras actuaciones. “También nos explicó que se quiere acondicionar la infraestructura necesaria para el soterramiento de contenedores”, indicó Arca. La Junta directiva de ADEC Villalba Futura también mostró su preocupación por los kiosqueros: “El edil nos dijo que se habían planteado cambiar este tipo de mobiliario urbano, pero que era muy caro”. En este sentido, continúa Carmen Arce, “aún no tenía muy claro cómo se iban a ejecutar los trabajos en las zonas donde se ubican los kioscos, pero nos comunicó que era muy probable que los levantasen, se pavimentase y luego los volviesen a colocar”.

Preocupación
Finalmente, la presidenta de ADEC le trasladó al concejal la preocupación de los comerciantes y vecinos. “La muestra, que está muy avanzada, arroja unos primeros resultados que indican que un 93 por ciento de los encuestados señalan que la calle Real necesita una remodelación, ya que su iluminación es deficitaria, el mobiliario se encuentra en pésimas condiciones, etc..; es decir, está hecha una pena, pero no quieren obras, y los comerciantes con mayor motivo. Hemos pedido que los trabajos se ejecuten en menos tiempo. Seis meses es demasiado para tener empantanada una calle, aunque no se llegue a cortar al tráfico de vehículos”.