Feria de San Isidro: “El Cid” sale con justicia por la puerta grande de Las Ventas y “El Juli” cuaja una buena faena
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
La segunda parte de esta Feria de San Isidro de Madrid no ha sido tan brillante como la primera. Ha habido demasiadas tardes de bostezo y con escasas cosas de relieve. Demasiadas tardes de decepción y muchas corridas mal presentadas y donde el ganado ha sido manso, flojo y falto de casta y bravura.
Lo más destacado lo protagonizaron el pasado lunes 22 “ El Cid”, que salió en hombros por la Puerta Grande, y “El Juli” que cortó una oreja tras realizar una notable faena a un chico sobrero de Ana María Bohórquez, dentro de una mansa corrida de “Alcurrucén”, donde sólo valió un toro, el tercero.
“El Cid” cortó una oreja tras dejar naturales espléndidos y torerísimos al tercero y estar entregado, firme y dispuesto con el áspero toro que cerró la tarde y al que a base de tragarle le arrancó la oreja. “El Juli” firmó una faena a ese sobrero con naturales de un excelente calado que si hubiera redondeado algo más hubiera conseguido el doble trofeo.
Otro torero que ha cortado un trofeo esta semana y que a punto estuvo de salir en hombros, aunque debió hacer mucho más, ha sido Matías Tejela, el pasado miércoles 24, dentro de la seria y buena corrida del Puerto de San Lorenzo. El madrileño se llevó de un excelente toro, al que dejó momentos de buen calado, aunque algunas tandas resultaran enganchadas e hicieron que cortara sólo una oreja. Luego, sin embargo, sí estuvo importante con el imponente sexto, al que le hizo una faena de mucho mérito. Si no pincha, esta oreja sí era de las de verdad. No tuvo su tarde César Jiménez con un toro alegre en una labor de más a menos, y acusó falta de técnica con el complicado quinto. Esta corrida de El Puerto es de las que más han embestido en lo que llevamos de feria. Aun sin cortar orejas, Enrique Ponce dejó impronta de figura del toreo el sábado 20, con un violento astado de Pereda al que extrajo muletazos que sólo una figura como él es capaz de conseguir. La corrida de ese día era de Javier Pérez Tabernero, que resultó decepcionante por mansa y descastada.
La de “Guardiola” del domingo 21, dejó tres toros con ciertas posibilidades que no fueron aprovechados del todo. El más tocado de la tarde fue Fernando Cruz, que estuvo espeso y amontonado. A Javier Valverde le tocó uno de una calidad sublime y aunque templado su nobleza pedía algo más.
Otra de las grandes decepciones de esta feria la ha puesto la ganadería serrana de Baltasar Ibán. El encierro ni estuvo bien presentado, ni sacó la casta y raza de antaño, ni la bravura que se me antoja en un hiero como este. Sin embargo, flojeó, sacó aspereza y se negó a embestir. Sólo podemos medio salvar al primer toro. Es una lástima porque esta ganadería era de las más bravas y hoy se encuentra en zona de peligro, lejos de las ferias y con dos fracasos gordos en los últimos años en Las Ventas. Y esto algo tiene que ver con no seleccionar de la forma correcta. Dávila Miura estuvo de pena con ese toro medio potable en su segunda comparecencia en Madrid. El miércoles 17, Serafín Marín dio la vuelta al ruedo en la inválida y mal presentada corrida de Cubillo.