Que los dirigentes del Ayuntamiento de Collado Villalba se planteen gastar más de un millón de euros (casi 200 millones de las antiguas pesetas) en la organización de Viajazz, es algo que que preocupa a muchos villalbinos. Una ciudad donde la mayoría de las infraestructuras están en precario y en la que existe un fuerte déficit en áreas relacionadas nada más y nada menos que con las actividades deportivas, sociales, culturales y educativas, no se puede permitir el lujo de confeccionar el cartel de un festival de jazz en el que algunos de los intervinientes, caso de Bob Dylan (en la imagen), van a cobrar por hacernos llegar su repertorio musical alrededor de 300.000 euros, o lo que es lo mismo: 50 millones de pesetas. Pero la cosa no termina ahí, porque además de esta figura de la música popular, el Consistorio local, en un ejercicio incomprensible de tirar la casa por la ventana (en cristiano o en román paladino a eso se suele llamar despilfarro), ha contratado a B.B. King, un bluesman que no sale al escenario por menos de 200.000 euros, y a todo un tropel de figuras de la música como Joe Sample y Randy Crawford, Wayne Shorter, el grupo Fourplay, Al Jarreau y el cuarteto español formado por Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán, entre otros.
Y lo que más nos preocupa es que al Ejecutivo local, aun sabiendo lo ruinoso que resulta para las arcas municipales este tipo de eventos (ha organizado ya tres festivales), siga tropezando en la misma piedra de forma obsesiva. Para refrescarles un poco la memoria -los políticos, cuando les interesa, dicen ser bastante olvidadizos- les diré que en la edición del año pasado, donde no había tantas figuras de renombre, los gastos de Viajazz ascendieron a 844.634 euros, mientras los ingresos alcanzaron los 291.900 (euro arriba, euro abajo), lo que supuso un déficit de 552.734 euros (más de 90 millones de pesetas). Este año, con un cartel mucho más rimbombante y salvo que se produzca algún milagro en el capítulo de financiación, las pérdidas pueden superar tranquilamente los 900.000 euros, o lo que es igual: 150 millones de pesetas.
Como ya conocen muchos de ustedes, en este periódico hemos pedido a nuestros lectores a través de internet (
www.elfarodelguadarrama.com) que nos digan en qué invertirían ese millón de euros que aproximadamente se va a gastar el Ayuntamiento en Viajazz y, hoy, es decir tres días más tarde, las respuestas son contundentes: sólo el 8 por ciento destinaría este dinero a festivales musicales; el 32 apuesta por invertirlo en libros, material escolar y transporte para los pequeños colegiales; un 21,6 iría a parar a programas de integración social y cerca del 19 por ciento a dotaciones culturales, por un lado, y a subvenciones deportivas o reforma del polideportivo cubierto, por el otro.
Así de claro. Huelgan pues más comentarios porque creo que somos lo suficientemente mayorcitos para saber qué debemos hacer con nuestro voto en mayo de 2007 si queremos evitar que casos como este se vuelvan a producir.
Y haciendo honor a la denominación de esta sección, de las sombras pasamos a la luz para felicitar a los componentes de la Comisión de Seguimiento del Pacto Antitransfuguismo, donde están representados los responsables de política local de los principales partidos políticos, al acordar por unanimidad la creación de una lista negra de tránsfugas que impedirá no tan sólo el ser incluidos a partir de ahora en las listas electorales, sino constituir, mantener o cambiar mayorías de gobierno en las instituciones públicas (mala noticia para los vividores de la política).
Jordi Sevilla, ministro de Administraciones Públicas y presidente de esta comisión, aseguró al termino de la misma que “se van a endurecer las condiciones para quienes buscan de manera ilícita un enriquecimiento personal”, y tanto el secretario de Política Municipal del PSOE, Álvaro Cuesta, como su homólogo en el PP, José Manuel Moreno, también mostraron su satisfacción a la hora de valorar el acuerdo, “ya que es el primero que se ha conseguido suscribir en España desde el año 2001, y permitirá combatir la corrupción y la especulación urbanística”.
Entre los acuerdos tomados para reforzar los mecanismos democráticos de lucha contra el transfuguismo, destaca la creación de una comisión de expertos independientes que decidirá, en caso de que los grupos políticos no se pongan de acuerdo, la existencia o no del concepto tránsfuga y trasladar al Ministerio Fiscal los casos donde se detecten indicios suficientes de comportamientos ilícitos en términos penales, cuando así lo solicite una mayoría cualificada de los miembros de la Comisión de Seguimiento del Pacto. Otro acuerdo importante es el relacionado con la apertura de expedientes disciplinarios y expulsión del partido al concejal tránsfuga y a quienes se beneficien de su conducta. Esta noticia, a priori, se puede considerar como una bocanada de aire fresco destinada a limpiar la contaminación existente en algunos ayuntamientos, y debe suponer un serio aviso para esos navegantes que utilizan el mar de lo público para pescar negocios de dudosa legalidad.