El mirador
Preparar
el futuro
E. Arias
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Con la crisis económica nos puede pasar como a Nueva Orleáns con el huracán Katrina: venga a poner diques contra las olas y, una vez inundados, la desolación resultante fue mayor que si no se hubiese embalsado el agua. Me refiero a ese coste creciente e inacabable de subsidios contra el desempleo en vez de aportar recursos para impedir el paro. Los expertos estiman que la tasa de desempleo en 2010 llegará al 20 por ciento de la población activa y afectará a 4,5 millones de personas. Para recordar una situación semejante, con una caída prevista del PIB del 3 por ciento, tenemos que remontarnos a la Guerra Civil, hace 70 años.
En ese patético escenario se vaciarán las arcas públicas, nuestro Estado se endeudará hasta las cejas, la calificación crediticia de España bajará varios escalones y nos quedaremos hipotecados al menos por una generación. Claro que, pese a semejante panorama, saldremos de esta, ya que no hay mal que por 100 años dure: pero se trata de salir cuanto antes y en las mejores condiciones, porque en todas las crisis siempre hay vencedores, obviamente, pero también, y lo que es peor, vencidos.
Estas reflexiones vienen al hilo de una reciente y esclarecedora conferencia de Pedro Luis Uriarte, ex consejero de Economía de Euskadi y ex vicepresidente del BBVA, responsable ahora de la Agencia Vasca de la Innovación (Innobasque), donde propuso unas recetas que, más allá del estricto ámbito geográfico de su institución, valen para todos: 1) cambiar el ritmo económico, 2) cambiar las ideas y 3) cambiar las personas.
Me temo que ante innovaciones de éste y/o de mayor calado seguiremos aplicando recetas del siglo XX cuando los problemas son del siglo XXI.