Collado Villalba: cero en urbanismo. Renovación en el PSOE de Galapagar - Mociones contra la Universidad Carlos III

El escritor y periodista Luis Prados de la Plaza publicaba el 12 de febrero de 1972 un reportaje en ABC titulado“Collado Villalba: cero en urbanismo”, donde ponía de manifiesto la falta de ordenación urbanística de este municipio al que le auguraba un futuro incierto, pronóstico nada descabellado si nos atenemos a la anárquica ordenación urbana que presenta este municipio 36 años después. A título de presentación, les adelantamos hoy un breve resumen sobre este magnífico trabajo periodístico, que les ampliaremos en el número extra que con motivo de las fiestas navideñas publicaremos el próximo martes, 23 de diciembre.
“Las edificaciones han ido creciendo una al lado de otra, mezcla de estilos y de desaciertos. La calle no tiene línea y la altura quiere imitar a Siete Picos, pero con pretensiones de ciudad. Así está la cosa. El precio del suelo sigue hacia arriba, como unas acciones de las que se cotizan en Bolsa. El ladrillo y el cemento se saludan todos los días, porque la obra empieza aquí, crece allí y se multiplica por todo un trazado que ha sido calificado de disparate... Señores responsables de Collado Villalba: se han ganado ustedes un cero en urbanismo...”
Segundo extracto: “No es que Collado Villalba haya amontonado sus casas, mientras los demás pueblos están dentro de la línea urbanística más ortodoxa. Todo es un desastre, aunque esa zona que se extiende junto a la bifurcación de las carreteras que van a Guadarrama y Navacerrada se acabe de escoger para ponerla como ejemplo de los desastres que se están cometiendo en la materia. Hace un mes el Área Metropolitana de Madrid informó de todo ello... La carestía del suelo, las urbanizaciones, los intereses creados, el negocio de nuestro tiempo han entrado a saco y van a terminar por asfixiar el término municipal de Collado Villalba...”
En el siguiente párrafo, Prados de la Plaza llega a comparar el funcionamiento del Ayuntamiento villalbino con el baile de la yenca: “Creo que fue la popular y efímera yenca de hace casi 10 años la que se bailaba con aquel estribillo de ‘izquierda, izquierda, derecha, derecha, delante, detrás, un, dos, tres... Algo semejante ha aprendido el Ayuntamiento de Collado Villalba, no sólo por extenderse a izquierda, derecha, delante y detrás de cualquier calle o patio a los cuatro puntos cardinales de su bello y natural paisaje -además ha crecido en altura, y ¡gracias que no ha llegado allí el invento de los subterráneos!-, sino porque las autoridades municipales han hecho también, como dice la yenca, un ‘delante-detrás’ en el trámite administrativo de querer frenar, primero y no atreverse, después....”.

Como podrán apreciar, los malos augurios de Luis Prados de la Plaza se han ido cumpliendo en estas últimas décadas, incluso se hizo realidad aquello que él calificaba como ‘invento de los subterráneos’ con esa obra faraónica (túnel y aparcamiento) de Honorio Lozano que va a suponer la ruina de un pueblo condenado a pagar 7.000 millones de las antiguas pesetas para satisfacer un absurdo y millonario capricho de su alcalde. Claro que ninguno de los burgomaestres que han ocupado la poltrona municipal en los últimos 40 años tampoco dio muestra alguna de querer dedicar un sólo minuto a analizar las reflexiones expuestas en ABC por el citado escritor y periodista. Y así pasa lo que pasa.

Las vacas sagradas del socialismo galapagueño han pasado definitivamente a la reserva, o al menos eso es lo que se desprende de la configuración de su nueva Ejecutiva, elegida el pasado fin de semana, donde salvo Hans Antón Böck, actual concejal del grupo municipal, el resto de los componentes son nuevos en la plaza, incluido su secretario general, Miguel Ángel Molina, que poco después de asumir el cargo manifestó: “Nuestra intención no es romper con el pasado, sino mejorar aún más los realizado por nuestros antecesores”. De momento, todo parece indicar que la hasta hace pocos meses regidora de Galapagar, Carmen Toledano, y el también ex alcalde, Manuel Cabrera, han quedado fuera de la nueva Ejecutiva, aunque permítanme que dude que ambos piensen mantenerse durante mucho tiempo al margen de la política local. Tiempo al tiempo.

El grupo municipal ‘Vive Colmenarejo’ (VICO) presentará en el próximo pleno dos mociones. En la primera pide el inicio de los tramites para denunciar el convenio suscrito en el año 1997, entre el Consistorio local y la Universidad Carlos III, al considerar incumplida la cláusula tercera del mismo, donde se recogía que el Ayuntamiento vendía a este centro unos terrenos muy por debajo de su precio de mercado (85 millones de las antiguas pesetas) para que desarrollara 100 viviendas que serían destinadas exclusivamente a profesores y empleados del mismo. La construcción de estos pisos se llevaría a cabo en dos fases, estableciéndose la primera de ellas en el año 1999. Pues bien, la Carlos III no sólo incumplió dicha clausula, sino que además destinó dicha parcela a un parking, de ahí que VICO solicite la inmediata reversión de los terrenos al patrimonio municipal. En la segunda moción, este grupo solicita retirar la subvención que vía IBI percibe esta universidad por importe de 30.000 euros anuales. El debate está servido y la alcaldesa, María Isabel Peces Barba, va a tener que hilar muy fino para no levantar suspicacias entre sus compañeros y representados.