Torrelodones elabora un Plan de Ajuste Presupuestario de cara al próximo ejercicio

El primero de los bloques incluye medidas diseñadas para mejorar la eficiencia de la propia Administración Local reduciendo sus costes de funcionamiento. En este sentido, se prevén limitaciones en los gastos de personal, de modo que sólo se autorizará el crecimiento de la plantilla para dar cobertura a los servicios operativos (Policía o Protección Civil) y para atender necesidades vinculadas a los servicios sociales. Además, se congelan los salarios de todos los cargos públicos electos y de confianza, así como la asignación a grupos políticos municipales, dietas o asistencia a órganos colegiados.

En paralelo se adoptarán otra serie de acciones, como la contención del gasto en todas aquellas actuaciones que no se consideren imprescindibles (publicidad, protocolo, gastos de representación, material de oficina, etc.). El Plan marca el objetivo de rebajar un 20 por ciento el coste de materiales y suministros (papel, fotocopias y consumibles informáticos, evitando la remisión de documentación en papel y priorizando el uso del correo electrónico como medio de transmisión de la información.

Por otra parte, se establece la puesta en marcha de planes de ahorro energético con el fin de reducir el consumo interno en edificios municipales mediante la implantación de criterios para la regulación de temperaturas y horarios de encendido y apagado de edificios públicos, además de la reposición de luminarias por otras de bajo consumo y un exhaustivo control de temporizadores para el alumbrado público.

Garantizadas las prestaciones sociales

En cuanto al segundo bloque, se establece la necesidad de ajustar el techo de gasto a los ingresos que realmente se prevé alcanzar, analizados con prudencia, y analizándolos mediante un seguimiento constante a lo largo del ejercicio para adaptar las previsiones a la realidad de manera permanente.

La reducción de la capacidad de gasto obligará a la realización de un estudio de las actuaciones que resten por ejecutarse a lo largo del ejercicio que establezca un orden de prioridades. Los nuevos gastos estarán subordinados a una evaluación de su eficacia y su coste y se revisarán la necesidad y la oportunidad de las líneas de subvención previstas, aunque en ningún caso se recortarán subvenciones municipales que incentiven la actividad económica. En el resto de los casos, se congelará el importe de las subvenciones de gasto corriente, o en su defecto se les hará decrecer en el mismo porcentaje en que hayan disminuido los ingresos corrientes.

Por último, el Plan no plantea recortes en las partidas presupuestarias destinadas a atender gastos sociales ya contraídos.

Equilibrio presupuestario

Estos son algunos de los aspectos recogidos en el Plan, comunicado por el alcalde a los miembros del equipo de Gobierno el pasado ocho de octubre, y que sirve como base de elaboración de los presupuestos municipales de 2009. El regidor ha señalado que la incertidumbre sobre la duración de la crisis y sobre las medidas estatales que garanticen la financiación de los ayuntamientos motiva la adopción de estas medidas. Galbeño ha subrayado que “la situación de Torrelodones parte de un ejercicio en el que se ha conseguido un ahorro neto de casi dos millones de euros, por lo que podemos mirar al futuro con cierto optimismo, pero siendo muy conscientes de que es absolutamente necesario aprobar medidas que garanticen la prestación de servicios públicos dentro de un riguroso equilibrio presupuestario”.