El Escorial:
privatizar lo público
SANTIAGO HERRANZ - El Escorial
CISCO HERRANZ
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
La muy liberal y radical seguidora de la extrema derecha económica, social y política, presidenta de la Comunidad de Madrid, abrió el melón de las privatizaciones a destajo en la pasada legislatura en terrenos tan delicados como la sanidad y la educación, es decir en derechos básicos de los ciudadanos, inaugurando hospitales construidos con dinero privado por empresas que ahora tienen la gestión para su beneficio; algunos los ha inaugurado hasta tres veces y en el mejor de los casos han empezado a funcionar parcialmente, tarde y mal. Pero eso ya está amortizado, su propaganda le ha dado resultado.
En el caso de la enseñanza, la razón es muy clara, dividir en dos a la sociedad: la educación privada y privada concertada, centros, los segundos, que pagamos todos pero que no cumplen para nada las normativas, ni la legalidad; la educación pública abandonada por la Comunidad, con unos presupuestos cada vez más reducidos, amén de otros muchos problemas que demuestran que la apuesta de la señora presidenta es claramente lo privado.
Los lacayos de doña Esperanza que mandan en el Ayuntamiento de El Escorial siguen como corderos su caprichos. Privatizaron la Escuela de Música y se la han cargado en menos de un año; ahora privatizan el servicio del polideportivo. El mejor valor que tenemos son sus técnicos, excelentes profesionales que atraen a personas del municipio y de fuera de él; algunos, los que no eran fijos, ahora los contratan a través de una empresa privada; los otros, a los que aún no han echado, ya veremos cómo quedan cuando inicie la gestión la empresa que han contratado. Seguramente lo hacen ahora porque se habían gastado en unos meses, con la primera privatización, más dinero del permitido por la ley; la contratación que realizaron en octubre fue hecha de forma caprichosa, a dedo. Pero esa ilegalidad no debería ser corregida con un error. Si se hace debemos de pensar que es porque son incapaces de gestionar y tienen que buscar otros que lo hagan por ellos... En ese caso deberían irse a su casa y no arrebatar a los vecinos de El Escorial lo que siempre ha sido suyo. Aunque tal vez lo hagan porque su ideología les exige cargarse lo público para que sus amigos hagan negocios y seguir dividiendo a la sociedad en clases: los aprovechados que se enriquecen y los trabajadores que peleamos por subsistir cada día.
Si no sirven para gestionar, que se marchen, pero que no nos quiten lo que es nuestro.
Y la oposición, durmiendo.