Fritzl se defiende diciendo que "podría haberlos matado a todos"
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Josef Fritzl, el padre incestuoso que secuestró y violó a su hija durante 24 años en el sótano de su casa en Austria, ha declarado a través de su abogado que no es un monstruo. "Podría haberlos matado a todos y no se hubiera sabido nunca", sentenció Fritzl.
En su defensa, ha asegurado que una muestra de que no es un monstruo es la aprobación para que la hija mayor nacida de la relación incestuosa, de 19 años, fuera hospitalizada, lo que finalmente reveló sus crímenes. "Sin mí, Kerstin no estaría ya viva", ha dicho Josef Fritzl.
El acusado, que ha confesado los crímenes que le imputan, está encarcelado desde el 28 de abril en la prisión de Sankt Pölten. Afronta penas de homicidio por negligencia (por la muerte de uno de sus hijos, que fue incinerado en su propia casa, a los pocos días de nacer), 15 años por violación y 10 por secuestro.