Zapatero sin consenso en la primera vuelta
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
El presidente José Luis Rodríguez Zapatero, no ha logrado la mayoría absoluta (176 votos) del Congreso para ser elegido en primera vuelta. Se convierte así, en el primer presidente elegido en las urnas que no lo consigue y tiene que esperar a una segunda votación, que será el viernes, para ser investido.
Las quinielas se han cumplido. La ronda de negociaciones realizada en las últimas semanas por el PSOE para buscar apoyo ya lo venía anunciando. Ninguno de los partidos minoritarios ha dado su voto positivo a la candidatura de Zapatero. Sólo ha obtenido 168 votos de los diputados socialistas -falta un voto por la ausencia de una diputada- y ha recibido 158 votos en contra, PP y ERC, y 23 abstenciones.
Por tanto, no será hasta el viernes cuando se quite la coletilla de 'en funciones' y Zapatero pase a ser el jefe del Ejecutivo cuatro años más con la mayoría simple (169 votos) que le otorga su partido. Así, el PSOE no tendrá que ofrecer contrapartidas a otras fuerzas como ERC o PNV, que tantos quebraderos de cabeza le dieron durante los cuatro años anteriores.
Ya este jueves, en el primer día de debate, muchos de los partidos tomaron la decisión de no apoyar su candidatura. Ni siquiera el discurso de Zapatero, ni sus réplicas, ni el debate consiguieron cambiar la opinión de los más dudosos como CiU o PNV.
Esta mañana, el Grupo Mixto (CC, UPyD y NaBai), los últimos en comparecer, anunciaban que tampoco apoyarían al candidato socialista. Las pocas posibilidades que tenía de ser elegido en primera vuelta se desvanecían.
No ha sido una sopresa, el propio secretario general del PSOE, José Blanco, ya advirtió días antes del inicio del debate de investidura de que la ronda de contactos previa no buscaba el apoyo en la investidura sino el apoyo de las formaciones políticas en toda la legislatura.
Y con esa premisa fue este martes Zapatero al Congreso. Su discurso además de centrarse en proponer medidas para frenar la crisis económica tuvo como pilar principal la búsqueda del diálogo y la colaboración con todos los partidos y, en especial, con el PP, el mayor partido de la oposición.
Zapatero y Rajoy mantuvieron su primer 'cara a cara' de la legislatura con los mismos discursos y las mismas diferencias, pero con matices que indican un clima diferente en el que es posible que alcancen unos pactos imposibles de conseguir hasta ahora.
Como ya ocurriera en campaña, la economía ha sido uno de los temas estrella de estos dos días de debate, al igual que la política autonómica, la Justicia y, aunque parezca mentira en menor medida el terrorismo.
Zapatero desgranó un paquete de medidas inmediatas para hacer frente a la "desaceleración" que entraría en vigor la misma semana de constitución del gobierno, como la prometida deducción de 400 euros en el IRPF. Lejos del respaldo, Rajoy calificó de "parches" estas medidas y acusó a Zapatero de disfrazar la realidad y errar en su diagnóstico. Una línea muy similar a la del resto de partidos que pidieron concreción.