Opinión

Descalificaciones, sicarios y toros

Descalificaciones, sicarios y toros

Manuel J. Ortega

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La polémica nota enviada por la Junta Directiva de CyE a los medios de comunicación locales el pasado 2 de febrero, calificada como ‘réplica’ a las manifestaciones realizadas por el concejal de ADEI, Alberto Sánchez, a El Faro del Guadarrama el pasado 27 de enero (no de febrero, como se decía en la misma), en relación con las obras de remodelación de la calle Honorio Lozano, llegó vía e-mail a nuestra redacción cuando las páginas de local estaban cerradas. No obstante, su contenido ha salido publicado íntegramente en otro semanario junto a una entrevista realizada al presidente de la patronal villalbina, José Gil Costumero, en la que se vertían continuas acusaciones contra el citado edil que uno no tiene por menos que calificar de lamentables, sobre todo si tenemos en cuenta que quien las hacía era el máximo representante de los empresarios y comerciantes de la capital de la Sierra.

Así también lo ha debido entender un comerciante local y esto se desprende del contenido de una larga carta dirigida a José Gil y publicada en el popular foro de la página web de Asociación de Vecinos de Los Valles (www.asociacionlosvalles.org), donde el citado empresario le decía a su presidente, entre otras cosas, que “tu, como representante de los comerciantes, no puedes dar rienda suelta a tus sentimientos íntimos por muy dolido que estés. Te debes a tu cargo y debes ser exquisitamente escrupuloso con las palabras que utilizas en tus intervenciones...No puedes decirle a un concejal que no se entera de nada, que está frustrado, que no está preparado, que como cobra del Ayuntamiento y de nuestros impuestos deberían suspenderle de empleo y sueldo (¿por no estar de acuerdo con las decisiones del Equipo de Gobierno?)... Pepe, me arrepiento de haberte votado, me has defraudado. No me siento representado por ti. Menos mal que pronto tendremos elecciones en CyE y espero que esto te cueste caro”. La polémica, como muchos de ustedes sabrán, se ha suscitado por culpa de una obra que cada día que pasa va perdiendo el respaldo de los villalbinos y sobre todo de aquellos que residen en la calle Honorio Lozano. Mientras, el alcalde sigue con la cabeza bajo el ala, como las avestruces, sin querer ver como sus conciudadanos se enfrentan entre sí. Lamentable.

OTRO ASESINATO EN LA SIERRA.- Los matones de turno, también conocidos por sicarios, siguen ampliando su macabra zona de cobertura y así, lo que antes veíamos como un fenómeno un tanto lejano -solían actuar generalmente en zonas de la costa mediterránea o en importantes capitales de provincia- ahora ya los tenemos a la vuelta de la esquina. O al menos eso se desprende de los hechos delictivos que se han producido últimamente en nuestra comarca y que llevan el sello de este tipo de delincuentes sanguinarios que por un puñado de euros le pegan a su víctima dos, cinco o los tiros que sean necesarios para cumplir con el trabajo que les ha encomendado otro tipo de delincuentes, eso sí, estos de cuello blanco, cuyo único objetivo suele ser la venganza. Un vecino de Torrelodones, ex piloto de Iberia, apareció muerto el pasado lunes junto a la gasolinera situada en las proximidades del Casino Gran Madrid, según fuentes cercanas a la Guardia Civil, presentaba a priori muchos indicios de tratarse de un asesinato llevado a cabo por profesionales del crimen. La inseguridad ciudadana, lo decíamos la semana pasada, es la mayor preocupación de los vecinos de la Sierra del Guadarrama que se sienten indefensos por la falta de efectivos policiales en este cada vez más poblado entorno. Y lo más desalentador es que ni el delegado del Gobierno ni el director general de la Guardia Civil parecen haberse enterado de ello, de ahí que persistan en mantener las raquíticas plantillas de agentes en los ya casi obsoletos acuartelamientos de nuestra comarca, donde sus efectivos carecen de los medios técnicos necesarios para realizar su cada vez más difícil labor policial.

LA FERIA DE VALDEMORILLO.- No seré yo quien se atreva a escribir ni un sólo párrafo sobre la feria taurina de Valdemorillo, para eso está nuestro compañero Alfredo Fernández, que en la página 20 les pone al corriente de todo lo ocurrido en la misma. Sin embargo, una cosa es lo relacionado con el arte de Cúchares y otro, muy diferente, el entorno de unos festejos que permiten a los pescadores de negocios disfrazar una comida en Los Bravos o en La Fábrica con el político de turno para pedirle algún favor y, también, permite a más de un político de nuestro entorno, dejarse ver por el callejón de la plaza o junto a los burladeros dando y recibiendo abrazos a diestro y siniestro para mantener vivo su ego o incluso saludando a los que no han visto en su vida. ¿Será esta la nueva política de mano tendida? También vimos a algún que otro ‘ex’ intentando acercarse al pesebre para recordar, aunque sólo fuera por unos momentos, tiempos mejores pero no pudieron conseguirlo por aquello de ‘cuánto tienes, cuánto vales’. De los puros -habanos, dominicanos o nacionales- ni hablamos, porque pese a la insistencia del Ministerio de Sanidad en que dejemos de fumar, el sábado pudimos ver estacas de todos los tamaños. Y del frío, ¿qué quieren que les diga del frío? Pues como todos los años, insoportable, sobre todo a partir de cuarto toro. Claro que todo va en gustos, porque un viejo amigo y asiduo a los festejos de Valdemorillo desde hace no sé cuántos años me decía que el día que cubran la plaza esta feria quedará adulterada. “Habrá más público en las gradas, pero será otro tipo de aficionados. A los de verdad, a los incondicionales de esta feria, nos gusta que se mantenga la tradición, es decir, que haga frío”.