El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Es evidente que estamos inmersos de nuevo en el frenesí electoral de la campaña, como demuestran las recientes visitas a la Sierra de políticos de uno y otro signo, como la presidenta regional, Esperanza Aguirre, o los socialistas López Garrido y Tomás Gómez, además del ministro de Defensa, José A. Alonso. Pero los focos se han centrado esta semana en la máxima dirigente autonómica y también del PP madrileño, y más después de que forzara el rechazo a la presencia del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, en las listas al Congreso. Aguirre protagonizó un acelerado periplo por la Sierra, desde El Escorial (por donde no pasaba de manera oficial desde hace varios años) a Guadarrama; en el primer caso, para presidir la firma de un convenio en materia de vivienda y también para conocer un proyecto de rehabilitación en el entorno de San Bernabé; y en el segundo para inaugurar un complejo deportivo que está abierto al público desde hace meses, por lo que cabe inscribir esta última visita en el marco de acciones de corte electoral que se sucederán de manera inevitable hasta el próximo 9 de marzo. Lo que cabe pedir a los políticos es que no se dediquen exclusivamente a inaugurar y reinaugurar lo que ya está en marcha, sino que se hable y se debata de los problemas que nos afectan en el día a día, tanto a nivel local como nacional.