El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El ganadero de Galapagar Victorino Martín alcanzó un notable éxito el pasado viernes en la feria de Logroño. Por primera vez en la historia de esta ciudad se indultaba un toro. El victorino, que atendía al nombre de Molinito, de pelo cárdeno oscuro y herrado con el número 265, recibió el perdón de su vida tras mostrar una bravura encastada y en ocasiones desbordante. Diego Urdiales, un diestro que apenas torea, le entendió muy bien. Tras una clamorosa petición el presidente sacó su pañuelo naranja y el toro recibió el indulto y a su matador le fueron concedidos de manera simbólica las orejas y el rabo. El toro se recupera ya en el campo.