Tema de la semana

De Felipe II al ‘Che’ Guevara: un gran plató de cine en San Lorenzo

COINCIDEN durante LAS ÚLTIMAS SEMANAS LOS RODAJES DE DOS PELÍCULAS HISTÓRICAS, ‘guerrilla’ y ‘la conjura de el escorial’
ENRIQUE PEÑAS | Miércoles 22 de octubre de 2014
De los romanos a los Tercios de Flandes, de Almodóvar a Steven Soderbergh y de Franco al Che Guevara. De todo hay, o ha habido, en San Lorenzo de El Escorial, escenario de numerosas películas, especialmente durante los años 60 y 70 y que en los últimos tiempos ha recuperado ese papel de telón de fondo para el séptimo arte, con el argumento de un marco natural único y por supuesto de su patrimonio cultural, que se ajusta como anillo al dedo al auge del cine histórico.

Una de romanos
Hace algo más de un mes, Julio Aparicio y Alejandro Talavante salían por la puerta grande en la plaza de toros del Real Sitio. Casi 50 años atrás, en 1959, eran otros los gladiadores: la plaza -una de las pocas fijas de la época- fue por unos días circo romano en Los últimos días de Pompeya. El director de arte Ramiro Gómez utilizó una maqueta pintada para añadir otra arcada, con el mítico Vesuvio como fondo en vez del sanlorentino monte Abantos. Muchos vecinos recuerdan todavía imágenes de aquél rodaje, con túnicas y sandalias romanas y los pulgares hacia abajo, todo ello por un bocadillo y poco más.

Los tiempos han cambiado, y también los extras. 36 euros por día ofrecía recientemente la productora de La conjura de El Escorial. Eso sí, los aspirantes tenían que superan un casting: en los hombres se valoraba la barba y en las mujeres el pelo largo y sin mechas rubias. Se trata de uno de los grandes proyectos del cine español para los próximos meses, con dirección de Antonio del Real. Es un thriller histórico que combina intrigas políticas y policíacas, en el marco del reinado del Felipe II, y en concreto se centra en las diferencias y luchas entre la Casa de Alba y sus seguidores fieles y los miembros de Casa de los Mendoza, con Antonio Pérez y la Princesa de Éboli.

Por supuesto, el Monasterio tenía que ser uno de los escenarios, y de hecho Del Real aseguraba recientemente que era la primera vez que se grababa en determinados lugares de su interior para una producción de estas características. Por San Lorenzo han pasado en los últimos días actores de relumbrón como Jason Isaacs (Lucius Malfoy en Harry Potter y la Orden del Fénix) y Julia Ormond (Sabrina, Nostradamus), a los que se unen Jürgen Prochnow, Daniele Liotti, Joaquim de Almeida, Juanjo Puigcorbé, Blanca Jara, Fabio Testi, Rosana Pastor, Pablo Puyol y Concha Cuetos, entre otros. Segovia, Toledo, Ciudad Real, Úbeda, Baeza, Jaén y el Algarve portugués son otros de los escenarios de este rodaje, que se prolongará durante unos tres meses y que comenzó en San Lorenzo el 10 de septiembre.
‘Guerrilla’ en San Lorenzo
Que el Monasterio que se levantó durante el reinado de Felipe II iba a ser uno de los referentes de La conjura de El Escorial era más que evidente, pero mucho más sorprendente resulta que el bosque de La Herrería se vaya a convertir para la gran pantalla en trasunto de las selvas sudamericanas en las que Ernesto Che Guevara forjó su leyenda. El rodaje de Guerrilla concluyó con algo más que un susto el jueves 6 de septiembre, poco antes de la romería: un miembro del equipo de iluminación recibió una fuerte descarga de un cable de alto voltaje, siendo trasladado en estado muy grave al hospital 12 de octubre.

La película está dirigida por Steven Soderbergh (Erin Brokovich, Traffic), uno de los grandes nombres del cine norteamericano de la última década, y promete convertirse en uno de los taquillazos de la próxima temporada, con Benicio del Toro y la propia Julia Ormond -que ha hecho doblete en San Lorenzo- como los principales actores del reparto.

No es la primera vez tampoco que San Lorenzo viaja al continente americano por obra y gracia del séptimo arte. Hace dos años fue La fiesta del chivo, adaptación de la novela de Mario Vargas Llosa, la que se rodó durante varios días en una villa del Real Sitio, situada en la calle Juan de Toledo y que recuerda a las casas de indianos más propias del norte de la península. Por allí pasaron Isabella Rosellini y un excepcional Daniel Millán en el papel de Rafael Leónidas Trujillo, dictador en la República Dominicana durante los años 60 del siglo pasado.

Un par de series
Apenas a 200 metros de esta casa, en la histórica Villa las Torres -recientemente rehabilitada por la Comunidad de Madrid- se rodó en 1990 algún episodio de Los jinetes del alba, serie de TVE dirigida por Vicente Aranda, con Victoria Abril, Jorge Sanz, Fernando Guillén y Maribel Verdú en el reparto, quienes durante unos días revolucionaron los recreos del cercano colegio La Inmaculada Concepción. Otra serie, en este caso El pantano (Antena 3), también pasó hace cuatro años por San Lorenzo, con escenas en Los Jardincillos o Campillo; sin embargo, no hubo suerte con las audiencias y fue retirada poco después de su estreno.

El franquismo también ha llevado a San Lorenzo al cine con Los años bárbaros, largometraje de Fernando Colomo que contó con Ernesto Alterio como protagonista y que pasó por el mismo Valle de los Caídos. Más recientemente, el auge del cine histórico se he dejado sentir en la localidad con películas como Alatriste, de Agustín Díaz-Yanes y con Viggo Mortessen como actor principal; varios planos del Real Sitio se pueden ver en este largometraje, que también pasó por otras ciudades históricas como Úbeda o Baeza.

Por supuesto, no todo ha sido rigor histórico. Y si no que se lo digan a Stanley Kramer, que en Orgullo y pasión, con Frank Sinatra, Cary Grant y Sofía Loren, mezcló varios planos de El Escorial con el acueducto de Segovia al fondo, dentro de un largometraje que narraba la Guerra de Independencia contra las tropas napoleónicas.

Pedro Almodóvar
Y para terminar, nuestro cineasta más internacional, Pedro Almodóvar, también ha estado vinculado a San Lorenzo de El Escorial. La oscarizada Hable con ella (mejor película extranjera y mejor guión) se rodó en parte en el Real Sitio y antes con Carne trémula ya había un curioso guiño a la localidad: un autobús de Herranz, la empresa encargada de este servicio en la localidad desde hace décadas, partía desde el intercambiador de Moncloa; casi un símbolo del amplio recorrido de este municipio serrano por el cine.

De Sara Montiel y Lola Flores a Jorge Drexler
No están todas las que son, por supuesto, pero La caída del imperio romano, Alatriste, Orgullo y pasión o Hable con ella son algunas de las principales películas en las que San Lorenzo ha dejado su sello, como también lo ha hecho ahora, más recientemente, en Guerrilla y La conjura de El Escorial, que se estrenarán en 2008.

Una relación que viene de lejos y que tiene otros nombres ilustres, empezando por Angelino Fons, director de La busca, adaptación de la novela de Pío Baroja, y también de otros títulos menos elevados como El Cid cabreador. Vecino del Real Sitio desde hace años, llegó a figurar en las listas de Izquierda Unida a las elecciones municipales.

También sanlorentino de adopción es el uruguayo Jorge Drexler, que se llevó el Óscar a la mejor canción original en 2005 por su tema para Diarios de motocicleta, que curiosamente también era una película que se adentraba la vida -en este caso en el lado más sentimental- del Che Guevara, ahora visitante ocasional del Real Sitio en la piel del racial Benicio del Toro.

También las folklóricas han estado vinculadas de una u otra manera a esta localidad, empezando por Sara Montiel, que rodó en el Coliseo Carlos III El último cuplé, y terminando por Lola Flores, que se casó en el Monasterio con Antonio González El Pescaílla y que hace un par de años regresó figuradamente gracias al papel de Gala Évora en Lola, película que recreó la vida de La Faraona y que se rodó en parte en San Lorenzo, con emplazamientos como el paradójicamente hoy cerrado Cine Variedades. Tampoco convendría olvidar el activo papel que desarrolla la Asociación Cultural Club del Cine, con proyecciones semanales y el ciclo de cine inédito, así como el Festival de Cortometrajes Átalo en Corto, que celebró este verano su segunda edición.