A. Nadal - Torrelodones
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Fue el Partido Popular de Lamela el que en vez de dar por terminada la concesión de la explotación de la A-6 se la renovó a Iberpistas, ampliándola a Ávila y Segovia, con el perjuicio que supone para una ciudad sólo disponer de una autopista de peaje y carecer de una autovía gratuita alternativa.
La Bahía de Cádiz y Barcelona saben lo que significa lo anterior, pues gran parte de su deterioro empresarial se debe a ello.
Durante los años que duró la reforma y ampliación de la A-6, con los consiguientes atascos y problemas de tráfico diarios, no oí a Lamela y a los señores del PP quejarse jamás sobre estos problemas. Y ahora quieren culpar al PSOE de una situación creada por ellos al renovar y ampliar la concesión a Iberpistas.
Jamás entenderé por qué se negó el Ministerio de Fomento durante el gobierno de Aznar a prolongar el ‘bus-vao’ hasta Collado Villalba y a soterrar esta vía a su paso tanto por esta ciudad como por Las Rozas y Torrelodones.