Editorial

El nuevo curso

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La apertura del nuevo curso político se ha realizado sin sobresaltos, al menos a nivel local, aunque quizá habrá que esperar a que pasen algunas de las fiestas pendientes (Moralzarzal, Navacerrada, San Lorenzo, Guadarrama, Galapagar...) para que de verdad se inicie la actividad y cada uno se ponga en su sitio después de esos primeros 100 días de cortesía en esta nueva legislatura. Entre lo que cabe esperar para los próximos meses está la presentación de la nueva propuesta de Plan General de Ordenación Urbana en Galapagar, mientras que desde el PP ya alertan de la grave situación económica que puede sufrir el Ayuntamiento como consecuencia de la retirada del Avance aprobado por el anterior Ejecutivo.

En el caso de Villalba, las miradas siguen puestas en la obra de Honorio Lozano. El plazo que se fijó una vez que se comprobó la imposibilidad de terminar en mayo termina apenas en un mes, y a día de hoy parece complicado que se cumpla, por lo que la oposición ya permanece vigilante ante la actuación que más dio que hablar el pasado mandato.

Mientras tanto, en El Escorial se celebró en la tarde del miércoles el primer pleno ordinario de la legislatura, con un tono bien distinto a la crispación dominante en las últimas sesiones, aunque sí hubo un intenso debate en un tema que el Equipo de Gobierno deberá abordar con sumo cuidado, sobre todo en relación al equipo docente: la privatización de la Escuela Municipal de Música. Todos coinciden en el buen funcionamiento educativo de este centro, por lo que el cambio en la gestión sólo debería afectar a lo económico-administrativo, que es el apartado que ha despertado dudas en el Ejecutivo popular.

En esta localidad se celebró el pasado domingo la romería, y este fin de semana toma el relevo el vecino municipio de San Lorenzo. Dos ejemplos de cómo perviven las tradiciones, hasta el punto de que estas fechas figuran en rojo en el calendario de muchos de sus ciudadanos, que esperan a que pasen las fiestas para tomarse un merecido descanso. Galapagar, Guadarrama y Moralzarzal son otras localidades de la Sierra en las que ya empieza a sentirse el ambiente festivo. Sólo cabe esperar que todos disfruten de las celebraciones con responsabilidad y con el deseo de que no haya que lamentar ningún tipo de incidentes.