Editorial

De cara al futuro

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El concierto de Elton John el martes en la apertura de la quinta edición del Festival Internacional de Jazz de Villalba, Viajazz 2007, deja dos lecturas: la correspondiente al apartado artístico se salda con notable, mientras que la referente al capítulo económico-organizativo deja más interrogantes. El hecho de que al campo municipal de fútbol acudieran unas 3.500 personas (4.000 según las estimaciones más optimistas), incluyendo medios acreditados e invitaciones -apenas media entrada bastante justa-, hace que el festival arranque con una pérdida de 250.000 euros para el Ayuntamiento, ya que las primeras -y generosas- estimaciones de la recaudación en taquilla (recogidas ayer en una información publicada en El País) se cifraban en 360.000 euros. Por tanto, parece que el Consistorio tendrá que hacer efectiva la cláusula que establecía que entregaría al promotor la diferencia entre lo recaudado y el importe del caché (600.000 euros), sin que esa cantidad supere los 250.000 euros. En todo caso hablamos de más de 40 millones de las antiguas pesetas, aunque desde el Equipo de Gobierno apunten -tal como figura igualmente en el citado diario- que para hacer balance hay que esperar al final de Viajazz, “porque también hay patrocinios y faltan por subir al escenario grandes artistas como Caetano Veloso” (el siguiente en el escalafón monetario con 140.000 euros; luego vendría Al Green -100.000-). Evidentemente hay que contar con esta puntualización, pero en el mejor de los casos (8.000 entradas por cada uno de los cinco días, del 10 al 14 de julio, al precio de 25 euros) lo recaudado sería 1 millón de euros, mientras que el coste total del festival es de 1,5. De cualquier modo, es difícil esperar llenos absolutos en todas las jornadas, por lo que quizá esta situación pueda servir para reflexionar de cara a ediciones futuras, ya que la fijación por las figuras de corte mediático puede acabar por desnaturalizar las cosas (algo que no ha ocurrido en citas con solera como las de Vitoria, San Sebastián o el propio festival La Mar de Músicas de Cartagena). De hecho, el cartel de este Viajazz era probablemente, incluso sin Elton John, el de mayor recorrido artístico desde el inicio de su andadura en 2003, ya que cuenta sin duda con evidentes atractivos.

Finalmente, cabe citar de nuevo un interesante artículo publicado también en El País (2-7-07), en el que Álvaro Ruiz, director del Festimad, indicaba que la situación actual “recuerda a lo ocurrido durante los 80, cuando los ayuntamientos, empezando por el de Madrid con Tierno Galván, empezaron a fichar a los artistas, aunque sin la obsesión actual por las grandes figuras. Aquello acabó por romper el mercado”.