Muchas caras conocidas

Desde primeras horas de la mañana, en los aledaños de la Monumental se respiraba un ambiente impresionante. Miles de aficionados llegados desde distintos puntos de la geografía se paseaban por los alrededores de la plaza ansiosos por el gran suceso que se avecinaba. Unos y otros se paraban y charlaban amistosamente. Mucha gente guardaba cola para hacerse con un cartel que quedará para el recuerdo. Algunos incluso iban cargados con un buen puñado.

Las taquillas cerradas a cal y canto porque en cuestión de 20 minutos se habían vendido las 500 localidades que estipula el vigente reglamento de espectáculos taurinos. La reventa funcionaba sin cesar. La Policía indagaba para que esta mafia no hiciera su agosto. Los bares llenos. Hay que recordar que Barcelona no vivía un suceso parecido desde los tiempos de Chamaco o “El Cordobés”, y la expectación era realmente desbordante. La última vez que se colgó el cartel de “No hay billetes” fue hace 22 años.

Los tendidos poco a poco se fueron poblando de una gran cantidad de rostros conocidos que no deseaban perderse la vuelta al ruedo del genio de Galapagar. Políticos, actores, cantantes, gente del mundo del deporte y, cómo no, del toro, además de numerosos aficionados de su localidad, estuvieron para esta añorada vuelta al los ruedos de José Tomás. La Ministra de Cultura, Carmen Calvo, volvió a respaldar la Fiesta acudiendo a la corrida y dando de nuevo una lección a algunos compañeros de partido que están metiendo la gamba más de la cuenta. En una barrera se pudo ver a dos amigos de José Tomás y no menos genios en lo suyo, como son Sabina y Serrat. La Duquesa de Alba tampoco quiso perderse esta cita, así como el guitarrista Vicente Amigo o el periodista y gran aficionado Carlos Herrera.

Otras caras conocidos que viajaron hasta Barcelona para apoyar la Fiesta en Cataluña fueron Juan Antonio Samaranch, Fernando Sánchez Drago, el actor Sancho Gracia o el entrenador de fútbol José Antonio Camacho.

También asistieron numerosos un profesionales del mundo del toro, como Antoñete, Curro Romero, Víctor Mendes ó Serafín Marín, entre otros.

También estuvo presente la propia familia del torero. Así, el entrañable abuelo, “Tino”, que fue quien le inculcó la afición taurina, lanzó su bastón mientras su nieto paseaba por el ruedo las dos orejas con la sonrisa en el rostro. El torero lo recogió y paseó con él como en las grandes tardes. Estaba feliz de nuevo. Su nieto había vuelto a triunfar y a tocar la Gloria. La alegría es compartida por todos.