Los argumentos que han llevado a Más Madrid a esta lucha judicial fueron considerar que el alcalde incumplió el Pacto Antitransfuguismo, a sabiendas de que su decisión de permitir la constitución del grupo mixto con cuatro tránsfugas no se ajustaba a derecho. También por considerar que se trató de una decisión política tomada sin ningún rigor jurídico.
La resolución del presidente del Pleno partía de un presupuesto absolutamente falso, que Más Madrid no era un partido político, sino una coalición electoral, cuando la Junta Electoral lo confirmó. Más Madrid no se presentó en coalición y no es un hecho opinable, sino que está en el registro de partidos.
Cuca Sánchez ha insistido en que “Almeida formó este grupo para utilizarlo en su favor, para sus propios intereses. Y, desgraciadamente, esta ilegalidad la hemos pagado los ciudadanos”, ya que ha supuesto la aprobación de una Ordenanza de Movilidad que ha recortado Madrid Central, unos malos presupuestos (los de 2021), que recortaron los derechos de las mujeres y del colectivo LGTBI, la aprobación de una Ordenanza de terrazas mala para hosteleros, comerciantes y vecinos…”.
La sentencia, además, es muy clara y declara textualmente que estamos ante “un típico supuesto de transfuguismo”. Por todo ello, la portavoz adjunta de Más Madrid ha reclamado:
1.- La inmediata disolución del grupo mixto.
2.- La reposición del daño causado volver a la distribución de vocales de distrito elegidos democráticamente por los madrileños. Los tránsfugas no pueden tener beneficios políticos o económicos, diferentes a los inherentes a su condición de concejales.
3.- La dimisión del presidente del Pleno.
4.- Y que, por supuesto, que Almeida de la cara y explique a la ciudadanía por qué creo el grupo mixto ilegal, yendo en contra de la Comisión Jurídica Asesora de la Comunidad de Madrid, del Ministerio Fiscal y de la Junta Electoral Central, con tal de beneficiar políticamente al PP.
Para Más Madrid y para toda la ciudadanía, consideran, esta sentencia es una victoria legal y democrática. Almeida, de nuevo, se ha vuelto a poner en evidencia, demostrando que no está a la altura de Madrid y su gente. “Ha hecho lo más grave que puede hacer un alcalde, incumplir la ley para beneficiarse personalmente él y su partido. Ha incumplido la ley y lo ha hecho conscientemente por intereses espurios, le han pillado y lo ha visto toda la ciudadanía. Él debería tomar sus propias decisiones y si no las toma, dentro de 96 días las decisiones las va a tomar la ciudadanía madrileña”.
A su juicio, el alcalde Almeida debe saber que no se puede retorcer la voluntad democrática, no se puede retorcer la ley a su antojo para sus propios intereses. Está desgastado y débil. Está amortizado después de un mandato en el que no ha habido nada de gestión y sí muchos escándalos: las mascarillas, el espionaje a Ayuso, el grupo mixto ilegal, los arboricidios…