El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Un informe de Caja Madrid sobre la coyuntura económica asegura que en 2008 se producirá un descenso de hasta el 20 por ciento en el número de viviendas construidas, que serán unas 600.000. A la vez, el dato más relevante es que el precio de las casas podría congelarse e incluso sufrir una ligera caída, aunque sin llegar al brusco descenso que se registró en la crisis inmobiliaria de los años 90. De este modo se confirma el enfriamiento del mercado, especialmente por el endurecimiento de las condiciones de financiación y el alto nivel de precios alcanzado.